"Somos los únicos capaces de garantizar la estabilidad política"

1. Porque el proyecto político que planteamos está orientado a los retos que tiene que afrontar Bilbao en los próximos años, y porque somos la única fuerza capaz de garantizar la estabilidad política necesaria para el impulsar el progreso económico de esta ciudad. Necesitamos un ambiente político de normalidad, estable, y no la ruptura y el enfrentamiento permanente con el Gobierno central en el que tanto gusta moverse al PNV. Votamos personas, pero también vamos a votar partidos, que al fin y a la postre representan unos proyectos políticos muy concretos.

2. Una de las primeras cosas sería reconducir las conversaciones con el Gobierno vasco para impulsar la Línea 3 de metro, que une Otxarkoaga y Rekalde. No estoy dispuesto a asumir que haya bilbaínos de primera y de segunda categoría. También reuniría a los mandos de la Policía Municipal para resaltarles que el objetivo prioritario de su actuación pasará a ser la lucha contra la delincuencia, con su presencia activa en la calle y garantizando la seguridad de los ciudadanos y comerciantes. Y comenzar a dar los pasos necesarios para colocar a Bilbao en el escaparate empresarial.

"Lo último que necesitamos es un escenario de ruptura como el que plantea el PNV en nuestra tierra"

3. Pasar la página de la regeneración urbanística. El gobierno Azkuna sigue viviendo de las rentas de un proceso de transformación urbana perfectamente encauzado, pero Bilbao tiene que centrarse en las personas y su bienestar, en promover iniciativas capaces de generar empleo y expectativas de futuro. Esta ciudad necesita empleo e inversión, algo que Azkuna y sus concejales no han asumido estos cuatro años.

4. Vamos a esperar a los resultados del 27 de mayo. De momento, mi única intención es seguir trasladando a los vecinos de Bilbao el proyecto de ciudad que defiendo y las ideas que planteo para ponerlo en marcha. Estoy convencido de que el Partido Popular es el único que hace una apuesta clara por la estabilidad política necesaria para impulsar el relanzamiento de Bilbao. Lo último que necesitamos es un escenario de ruptura, como el que plantea el PNV para nuestra tierra.