¿Qué echa en falta en Bilbao?
La diseñadora Miriam Ocariz (Bilbao, 1968) presentó en febrero en la Pasarela Cibeles de Madrid su última colección, para el próximo otoño-invierno. Ella misma define esas prendas como "un trabajo de equilibrio entre volúmenes, texturas y conceptos, donde el rigor en el patronaje contrasta con la fluidez y ligereza de los tejidos estampados". Licenciada en Bellas Artes, comenzó dibujando camisetas que vendía a amigos y conocidos. Su creatividad y profesionalidad le han aupado a la cima de la moda nacional.
A pesar de su éxito y su proyección nacional e internacional, la diseñadora bilbaína ha lidiado con la falta de industria textil en Euskadi y ha mantenido su taller en la capital vizcaína, en el barrio de Deusto. También cerca del Nervión, pero en la otra punta, el Casco Viejo, tiene su casa Ocariz. No es extraño que elija la corriente de agua dulce para vertebrar el futuro de la ciudad. "La Ría juega un papel fundamental en la transformación que se está produciendo en Bilbao y la gente comienza a disfrutarla. No obstante, la actividad de la ciudad siempre ha girado en torno a ella. Ahora la encuentro un poco vacía, como en desuso, está más limpia, pero no hay barcos", se queja la modista, en un hueco de su intensa actividad de preparación de la colección de primavera-verano 2008. "Es cierto que la actividad de Bilbao ha cambiado y ahora es una ciudad de servicios, pero ¿por qué no desarrollar esta actividad también en torno a la Ría?", se pregunta Ocariz, quien baraja entre sus planes diseñar una colección para niña.
