El Zinemaldia revisará la obra de Henry King y el último cine nórdico

El 55º Festival Internacional de Cine de San Sebastián, que se celebrará entre el 20 y el 29 de septiembre, dedicará su retrospectiva clásica al prolífico realizador estadounidense Henry King. Revisará además el nuevo cine nórdico, el producido desde 1995. El reconocido diseñador gráfico Oscar Mariné, colaborador de directores como Pedro Almodóvar y Julio Medem, es el autor de los carteles de las distintas secciones del certamen.

Henry King (1892-1982) debutó como actor en 1913 y cuatro años después inició su carrera como director, ligada en su mayor parte a la 20th Century Fox. "Dentro de la política de los estudios, imprimió un toque muy personal a todas sus películas", resaltó ayer el director del festival, Mikel Olaciregui, durante la presentación del avance del programa del certamen.

Este "gran y fecundo realizador", según subrayó Olaciregui, llegó a rodar 116 títulos, aunque algunos de la época muda se han perdido. Y tocó todos los géneros. Aportó al western reflexiones sobre la violencia tan meritorias como El pistolero (1950) y El vengador sin piedad (1958). Destacó en el cine de aventuras con El cisne negro (1942) y El capitán de Castilla (1947). Adaptó tanto a Hemingway como a Scott Fitzgerald, y en el melodrama se movió entre los relatos crudos y los que llegaron a ser muy populares.

La revisión del trabajo de King, quien también practicó con estilo personal el denominado género americano, llegará acompañada por un libro editado por el Zinemaldia y la Filmoteca Española, en el que varios especialistas desglosarán su "rica, escondida y sugestiva" obra.

El festival repasará también el cine nórdico producido en los últimos doce años bajo el epígrafe Fiebre helada. Es un título que refleja el tipo de cine que se está haciendo en Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca e Islandia, "un cine de apariencia formal fría", pero que "está lleno de sentimientos", resumió Olaciregui.

"Quizá arranca del movimiento Dogma, pero lo ha transcendido y se ha convertido en una especie de cuna de grandes realizadores", añadió el responsable del Zinemaldia. Así, junto a directores de gran reconocimiento internacional, como Lars Von Trier y Aki Kaurismäki, se están dando a conocer nuevos cineastas como Thomas Vinterberg, Susanne Bier, Lukas Moodyson o Per Fly.

Tras seis años cerrado por obras, el Teatro Victoria Eugenia, donde dio sus primeros pasos el Zinemaldia, se suma de nuevo a esta cita con el cine. Allí se proyectarán los filmes de la sección Perlas de otros festivales y el segundo pase de las 18 cintas que integrarán la Sección Oficial y lucharán por la Concha de Oro.

Oscar Mariné ha elegido como motivo del 55º festival de San Sebastián el rostro de una mujer en el que ha intentado "reflejar el mar" de la ciudad.

El certamen ha reforzado sus galardones. Mantiene la dotación de 90.000 euros para el Premio Altadis de Nuevos Directores. Sin embargo, el Premio TCM del público, que se otorga a una de las películas de Perlas de otros festivales, pasa de 30.000 a 70.000 euros. Dentro de esta sección, se crea un segundo premio de 35.000 euros al filme europeo más votado. El Premio Horizontes Latinos pasa de 18.000 a 35.000 euros.