Europa mejora sus cuentas
El déficit fiscal del club comunitario cae hasta el 1,6% del PIB
La eurozona ha logrado reducir su déficit público por debajo del 2% del PIB durante el curso pasado. Los datos entregados esta semana por Eurostat revelan que las cuentas de los países miembros de la UE se encuentran bajo control y que, salvo excepciones, como Italia o Portugal, el resto de las economías presentan una mejora en su consolidación fiscal.
En algunas naciones persisten grandes desequilibrios. El caso más grave es el de Hungría, cuyo agujero fiscal ronda el 9,2% del PIB
Francia y Alemania logran mantener sus déficit, por primera vez en cuatro años, por debajo de los límites fijados en el Pacto de Estabilidad
Los datos presentados esta semana por Eurostat revelan que las cuentas de la eurozona y de la Unión Europea atraviesan por uno de sus mejores momentos. El indicador comunitario revela que el déficit fiscal de los 13 países que comparten el euro llegó hasta el 1,6% del PIB durante el año pasado, casi un punto menos que el 2,5% registrado el año pasado y muy lejos del 3% de 2003, el límite impuesto por la Comisión para preservar el Pacto de Estabilidad.
Estos buenos datos se explican por el excelente resultado de la economía europea durante el año pasado, que creció un 2,7%, 1,3 puntos más que el año anterior. Casi todas las economías de Europa han reactivado el consumo, han mejorado sus envíos al extranjero y se han visto beneficiados por la fortaleza del euro. Esto, sumado a un buen contexto internacional con precios del petróleo moderados, ha permitido a los Estados recaudar más dinero y tener menos costes.
Francia y Alemania
Para lograr esta cifra también ha sido clave el comportamiento de Francia y Alemania, los dos motores de la economía europea, que por primera vez en cuatro años lograron mantenerse por debajo de los límites del Pacto de Estabilidad. Durante 2006, Alemania redujo su déficit fiscal hasta el 1,7%, frente al 3,2% de 2005 y el 3,7% de 2004. Francia ha tenido un comportamiento similar, llegando hasta el 2,5%, después de que en 2005 su déficit fue del 3% y del 3,6% en 2004.
La reducción progresiva del déficit fiscal de países como Francia y Alemania y el superávit de naciones como España o Irlanda se debe principalmente al éxito de políticas de disminución del aparato estatal, recorte de beneficios sociales y de reformas en las pensiones. Si bien en la UE se considera que estos esfuerzos son aún insuficientes, se ha logrado reducir los gastos estatales y aprovechar el crecimiento estructural de sus respectivas economías.
En esta línea, los ministros del Econfin se han comprometido a aprovechar el actual momento de bonanza económica para acelerar la reducción del déficit. El objetivo es que todos los Estados miembros alcancen el equilibrio presupuestario en 2010. Los ministros de Economía de la UE prometieron dedicar los ingresos extraordinarios, fruto de la buena situación económica, a reducir el déficit y la deuda.
Países con desequilibrios
Pero no todos los países de la Unión Europea pueden sumarse a este compromiso. Los datos de Eurostat revelan que en algunas naciones persisten grandes desequilibrios. El caso más grave es el de Hungría, que tras su ingreso a la UE, en 2004, no ha logrado consolidar sus cuentas y su déficit ronda el 9,2% del PIB. Polonia, con un 3,9% de desequilibrio; Eslovaquia, con un 3,4%, y los históricos de Italia, con un 4,4%, y Portugal, con un 3,9%, no han mejorado.
En cuanto a la deuda pública, la eurozona registró en 2006 un 69%, un punto menos que el año anterior, pero sólo dos décimas menos que en 2003. Estonia (4,1%), Luxemburgo (6,8%), Letonia (10,0%) y Rumania (12,4%) registraron la deuda más baja, mientras que 10 países estuvieron por encima del 60% exigido por el Pacto de Estabilidad. En ellos se encuentra Italia (106,8%), Grecia (104,6%), Bélgica (89,1%), Alemania (67,9%), Malta (66,5%), Hungría (66,0%), Chipre (65,3%), Portugal (64,7%), Francia (63,9%) y Austria (62,2%).
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