Barcelona consigue ocho espacios para la creación

El cineasta Bigas Luna ha sido el primer creador en acudir a la llamada del galerista Pere Soldevila, impulsor de Barcelona Work Box (W_Box), un nuevo centro de producción, exposición, investigación y difusión de arte y pensamiento. El Work Box -que se situará sobre un solar municipal de unos 3.000 metros cuadrados en la zona del 22@ cedido durante cinco años- se compone de 25 contenedores de barco de unos 15 metros cuadrados que se alquilarán a creadores de diversas disciplinas por 300 euros al mes.

Este es uno de los proyectos, el único de iniciativa privada, que integran el nuevo plan de espacios para la creación que impulsa el Ayuntamiento de Barcelona y que tiene el objetivo de recuperar viejas fábricas, almacenes o espacios en desuso para cederlos, con condiciones, a colectivos o asociaciones de creadores, De momento se han seleccionado ocho espacios, incluido el Work Box, desde una parte del muelle seco de espacio del Fórum -que previsiblemente serviría por su amplitud y altura para la asociación de artistas de circo- hasta unas naves en el complejo fabril de Can Ricart que permitirían ampliar las instalaciones del centro de producción Hangar. Otros espacios seleccionados son el granero de la Isla Philips (que servía para secar las bombillas y filamentos y es el único espacio de este complejo fabril que falta rehabilitar) y el edificio cilíndrico del final del túnel de la Rovira (pensado inicialmente para comunicar peatonalmente Horta con el Carmel a través de una gran rampa en el interior de este espacio, pero actualmente en desuso). También se prevé ampliar el Ateneo de Nou Barris y utilizar parte de las instalaciones de las fábricas La Escocesa y Fabra i Coats.

Todos estos espacios son de propiedad municipal y el Ayuntamiento también se encargará de su rehabilitación y adecuación. "Confiamos en que serán reformas no muy caras porque son espacios que no precisan unos acabados caros", indicó ayer Jordi Martí, gerente del Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB). También señaló que las condiciones para ceder después estos lugares a colectivos o asociaciones pasan por asegurar el interés cultural y artístico del proyecto; la relación que puedan tener con el entorno, desde actividades educativas hasta programación abierta al barrio, y, por último, que esté abierto a la entrada de diversos creadores, y no sólo de un colectivo cerrado, que puedan ir rotando con el tiempo.

Tras identificar estos espacios -que pueden ampliarse ya que el objetivo es que haya 10 en esta legislatura-, se han recibido propuestas de colectivos y se han estudiado los criterios en una comisión asesora municipal. Martí agregó que ahora llegará el momento de ver cuál de estos lugares es más adecuado para los diversos colectivos, algunos de los cuales pueden compartir espacios, y comenzar después la rehabilitación.

El que está más definido, de momento, es el Work Box. Su impulsor es Pere Soldevila, propietario de la Galería Metropolitana, que ya fue quien ideó y cofundó Loop, la feria de videoarte. Su nueva iniciativa es aún más ambiciosa, articulada e innovadora. Él dice que es una "galería expandida", que, bajo el lema Connecting Art, Science and Technology, podría inaugurarse a mediados de septiembre. Estaría formado por tres edificios dedicados respectivamente a la creación, producción y difusión. El dedicado a la creación, explica Soldevila, "es en sí mismo un proyecto artístico de Tim Otto Roth. Está dotado de una fachada que cambia de color gracias a unos tubos de luz incrustados en la propia arquitectura".

Soldevila defiende el sistema de los contenedores porque "conforman un espacio flexible y adaptable que apuesta por un desarrollo sostenible a través de sistemas de autoabastecimiento, aprovechamiento de energías renovables y uso de la luz natural". A la espera de su inauguración, el centro ha puesto en marcha Virtual Box (www.barcelonaworkbox.com)