Una misión del Rey de Marruecos pide apoyo a Zapatero para el Sáhara
El presidente del Gobierno recibe a un grupo de colaboradores de Mohamed VI
Son los que de verdad mandan en Marruecos, los íntimos colaboradores del rey Mohamed VI. Chakib Benmussa, ministro de Interior, Fuad Alí Himma, descrito como el brazo derecho del soberano, Yassin Mansuri, jefe del servicio secreto exterior, y Taieb Fassi-Fihri, auténtico titular de Exteriores.
Los cuatro tenían previsto viajar a Madrid la semana próxima pero adelantaron su visita. Se presentaron el miércoles por la tarde y obligaron al presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y al ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, a buscarles un hueco en su agenda para recibirles en La Moncloa. Hasta que lo encontraron la delegación tuvo que esperar largas horas.
Les urgía dar a conocer y pedir a España, la antigua potencia colonial del Sáhara Occidental, su respaldo al plan de autonomía para ese territorio cuya independencia reivindica el Frente Polisario.
A sus anfitriones españoles no les entregaron un texto sino que les explicaron su filosofía. "Se inspira en las autonomías españolas", aseguró un diplomático conocedor de la iniciativa. "No es un texto cerrado porque quieren dejar margen a la negociación con la otra parte", añadió.
Fue Mohamed VI quien quiso que su delegación cambiase sus planes para viajar a Madrid justo después de París. Allí, su proyecto de autonomía fue calificado de "constructivo" por el presidente Jacques Chirac a lo que su ministro de Exteriores, Philippe Douste-Blasy, añadió que era "serio".
En Madrid, las simpatías de la opinión pública hacia el Frente Polisario -que rechazó de antemano la propuesta de Rabat porque descarta la independencia- incitaron al Gobierno a ser más cauto. Moratinos dijo haber escuchado "con gran interés las ideas que han expuesto".
Autodeterminación
Zapatero no se pronunció ayer, pero sus ideas son conocidas. Durante una intervención, en julio de 2002, en la universidad socialista de verano Jaime Vera, señaló, en respuesta a una pregunta sobre el Sáhara Occidental, que "la autodeterminación no hace más felices a los pueblos". Por tanto, cabrían otras soluciones.
La abstención de España en dos votaciones sucesivas en la Asamblea General de la ONU, el pasado otoño, sobre resoluciones que propugnaban la autodeterminación del Sáhara es también reveladora de las inclinaciones del Gobierno español.
La próxima cumbre anual hispano-marroquí ha sido fijada para marzo en Marruecos. Zapatero tendrá entonces la oportunidad de rediscutir con el Monarca del conflicto sahariano.
A principios de la semana próxima la misma delegación marroquí viajará a Washington y de aquí a abril tiene la intención de recorrer las capitales de otros 13 países miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
Dentro de dos meses, Rabat remitirá al Consejo de Seguridad de la ONU el texto definitivo de su proyecto autonómico con la esperanza de que, en el mejor de los casos, lo asuma y, en el peor, alabe sus esfuerzos para desbloquear el conflicto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
