CC OO traslada al Consell sus dudas ante el futuro de Ford

Una delegación de CC OO encabezada por su secretario general Joan Sifre trasladó ayer al consejero de Economía y Hacienda sus dudas sobre el futuro de la producción en la factoría de la multinacional Ford en Almussafes y pidió al consejero que reclamara garantías a la empresa. Camps, según un portavoz oficial, destacó la buena salud que disfrutan las dos grandes plantas industriales de Ford y Vossloh.

La carga de trabajo en Almussafes puede caer a la mitad en poco más de un año

Sifre, Ángel Quiles, secretario de la federación del metal de CC OO, y Miguel Rosaleny, representante de CC OO en el comité de empresa de Ford, plantearon al responsable de Economía la necesidad de mantener a toda costa el tejido industrial de la Comunidad Valenciana y su cuota de aportación a la riqueza regional. Las factorías de Ford, en Almussafes, y Vossloh, antes Alsthom, en Albuixec, como bastiones de la industria pesada en territorio valenciano centraron buena parte del intercambio.

Si Camps afirmó, según una fuente oficial, que ambas factorías gozan de una magnífica salud económica, los representantes de CC OO, sin embargo, recordaron al consejero de Economía que la carga de trabajo de la factoría de Ford puede reducirse a la mitad en poco más de un año.

La multinacional del automóvil ya ha anunciado que dejará de producir en abril los vehículos Mazda que representan en torno al 15% de la producción actual; a finales de 2007 se trasladará definitivamente la fabricación del Ford Ka a Polonia, un modelo que representa en torno al 20% de la producción de Almussafes; y el 75% de la fabricación del futuro Fiesta, que se lanzará al mercado a mediados de 2008, ya está adjudicada a la factoría de Ford en Colonia. El restante 25% todavía no está adjudicado, pero los responsables de Ford exploran desde hace meses la posibilidad de comprar una factoría en Rumania. Si Almussafes perdiera la producción del Fiesta, habría recortado su producción por encima del 60%, con el consiguiente coste laboral.

Camps, siempre según una fuente oficial, sorteó el alarmismo y redujo el contenido del encuentro a una reflexión conjunta.