Un hombre mata a su esposa con un cuchillo de cocina

María del Carmen Fontán, de 50 años, falleció ayer en el hospital Montecelo de Pontevedra víctima de la violencia machista a manos de su marido, Benito Paz Piñeiro, de 51 años. La tragedia ocurrió en la noche del domingo en el domicilio familiar de la pareja, en el municipio de Sanxenxo (Pontevedra), donde el presunto homicida asestó a su esposa una puñalada en el costado izquierdo con un cuchillo de cocina.

María del Carmen Fontán y su marido trabajaban de mariscasdores en la Ría de Arousa y vivían en Nantes, una pequeña localidad del municipio pontevedrés de Sanxenxo. Agentes de la Guardia Civil acudieron a la casa familiar alrededor de las 23.30 horas del domingo, después de recibir una llamada telefónica comunicando la agresión. Los miembros del instituto armado se encontraron a la mujer tendida en la cama con una herida de arma blanca. Fue trasladada al centro hospitalario, donde ingresó con graves heridas que le afectaban a órganos vitales, por lo que falleció a mediodía de ayer.

Aunque entre sus vecinos muchos no daban crédito a lo ocurrido, María del Carmen ya había denunciado a su marido por otro intento de agresión en septiembre de 2004. Pocos días después, ella misma y sus hijos optaron por retirar la denuncia. Los hechos sucedieron tres meses antes de que entrara en vigor la Ley contra la Violencia de Género, por lo que la Fiscalía no pudo actuar de oficio y se vio obligada a archivar el caso.

El presunto homicida también contaba con un amplio historial en los archivos de la Guardia Civil de Tráfico. Benito Paz tiene varias denuncias acumuladas por conducción temeraria y por dar positivo en controles de alcoholemia, lo que le ha llevado a los juzgados en diversas ocasiones. En el departamento municipal de Servicios Sociales de Meaño, del que depende administrativamente la localidad de Nantes, no tenían constancia de que la víctima hubiera sufrido malos tratos, según confirmó el alcalde, Jorge Domínguez. Pero la afición al alcohol del agresor era bien conocida en la localidad.

El alcalde de Meaño admitió que varios vecinos de la pareja le habían comentado que Benito Paz era "agresivo verbalmente" y "se emborrachaba mucho". "Aparentemente por fuera era culto y educado, pero también sabía que era agresivo en casa, no físicamente, más bien verbalmente", afirmó el regidor, quien explicó, en declaraciones a Europa Press, que el hombre es "alcohólico y se le solía ver muy borracho en los bares".

"Pero también veía que era una persona muy educada. De lo de pegarle a la mujer yo no tenía constancia", agregó Jorge Domínguez. "Por fuera era un buen tío, un buen mariscador y muy trabajador, que se defendía muy bien. Pero visto lo visto, por dentro era otra persona", puntualizó el alcalde. Benito Paz pasará hoy a disposición del juzgado de Cambados. La Vicepresidencia de la Xunta de Galicia, de la que dependen los servicios de Igualdad y Bienestar, ha convocado para hoy concentraciones silenciosas en todos los centros que dependen de ese departamento.