Once viviendas que nadie quiere

Los precios de las casas en Córdoba también están por las nubes. Según los últimos datos del Ministerio de la Vivienda, el metro cuadrado se cotiza a 1.462 euros, en cifras absolutas. A los cordobeses, como al resto de los españoles, les cuesta hacerse con una casa propia. Sin embargo, al Ayuntamiento de la ciudad, gobernado por IU, le sobran 11 Viviendas de Protección Oficial (VPO). El Consistorio volvió ayer a sortear 80 pisos que nadie quiso en diciembre de 2004. Pero sólo ha encontrado 69 personas dispuestas a comprar las casas. En total, 510 cordobeses han rechazado adquirir estas VPO que les correspondían. ¿Por qué? La zona tiene mucho que ver. El polígono Guadalquivir, donde está prevista la construcción de la promoción municipal, tiene el estigma de ser un barrio deprimido y falto de infraestructuras.

Los pisos que nadie quiere son de 90 metros cuadrados, con tres dormitorios, cochera y trastero. El precio que tienen que pagar los afortunados es de 78.130 euros. Está previsto que se entreguen en un plazo de dos años. Los 69 vecinos que ayer, pasadas las diez de la mañana, acudieron a la sede de la empresa Viviendas Municipales de Córdoba (Vimcorsa) ya sabían que iban a ser vecinos de bloque. Sólo se sorteó, con un pequeño bombo que perfectamente se podría utilizar en un bingo casero, el orden de elección de la casa.

Antonio Portillo, gerente de Vimcorsa, fue el encargado de presidir el sorteo. "Hemos agotado todas las solicitudes de viviendas de tres dormitorios", aseguró. De hecho, según explicó ayer uno de los agraciados, ellos ni siquiera habían sido seleccionados en el primer sorteo de 2004.

Córdoba fue la primera ciudad andaluza en aplicar la Ley de VPO impulsada por la Junta de Andalucía. Vimcorsa realizó ese primer reparto hace dos años. Se presentaron unas 4.000 solicitudes de cordobeses. Finalmente, los técnicos municipales introdujeron en el bombo 1.475 números.

Los aspirantes a las VPO optaban a dos promociones: una de 140 pisos en la zona de Noreña y otra de 232 en la barriada del Polígono del Guadalquivir. No se podía elegir uno u otro emplazamiento. En la adjudicación de la promoción de Noreña, una zona considerada de clase media, no hubo problemas. En la del Guadalquivir, sí y 80 pisos de tres dormitorios no encontraron comprador.

Así que el Ayuntamiento tiró de la lista de aspirantes seleccionados, luego de la de no seleccionados... Pero no hubo manera y siguen sobrando 11. Según el Consistorio, esas casas se utilizarán "para los realojos que sean necesarios o bien por la propia empresa Vimcorsa para el próximo sorteo de viviendas" que se celebrará en verano.

Portillo, como representante municipal en el reparto de ayer, quiso distinguir entre necesidad y deseo. "Una cuestión es quien no tiene más remedio que comprar una vivienda protegida porque no puede acceder a otra y otra cuestión es quien quiere simplemente comprar una vivienda protegida", dijo. Según Portillo, "hay mucha gente interesada en adquirir una VPO en un sitio con altas plusvalías pero ya no hay tanta demanda para viviendas en lugares donde no hay tantas plusvalías".

Paloma Puerto, una trabajadora de una organización no gubernamental, estaba ayer contenta y tranquila. Acudió al sorteo sin nervios. Sabía que sería propietaria de una de las 80 VPO en el Polígono Guadalquivir que nadie quiso en diciembre de 2004. Tendrá que pagar por su piso un precio muy por debajo del mercado libre. "No entiendo cómo la gente la rechazó en el sorteo anterior. Si lo que queremos es una vivienda, ¿qué más da dónde esté? Claro que todos queremos una en el centro, pero no puede ser", dice Puerto.