Una rica relación surgida de la tragedia

Los intelectuales y artistas republicanos españoles encontraron en México un refugio donde mantener viva su ideología progresista, abierta y liberal tras la Guerra Civil, a costa de ser silenciados y condenados al olvido en su propio país. Los exiliados de 1939 como Emilio Prados, Manuel Altolaguirre o Luis Cernuda contribuyeron, al mismo tiempo, al progreso cultural de la sociedad mexicana, con la que llegaron a sentirse totalmente identificados. La revista El Maquinista de la Generación, editada por el Centro Cultural de la Generación del 27, ha dedicado su último número a explorar esta fructífera relación surgida de la tragedia.

Esta edición de la revista, de 247 páginas, se publicó con motivo de la pasada Feria del Libro de Guadalajara (México), dedicada a Andalucía. "Se trata de recordar y agradecer la acogida de México a numerosos republicanos españoles. La mejor promoción de nuestras letras acabó recalando allí y hemos dedicado el número a su implicación en el imaginario cultural méxicano", señala Julio Neira, director del Centro Cultural de la Generación del 27, organismo dependiente de la Diputación de Málaga.

La publicación incluye cinco cartas manuscritas inéditas de Emilio Prados a Jorge Guillén

Uno de los platos fuertes del número 12 de El Maquinista de la Generación son cinco cartas manuscritas inéditas del poeta malagueño Emilio Prados a Jorge Guillén. "Las cartas se encontraban en el archivo de Guillén de la Biblioteca Nacional. Se tiene la imagen de que Prados era una persona taciturna y solitaria, pero en estas líneas sorprende con una personalidad afectuosa y expansiva", afirma Neira.

En la primera de las misivas, de mayo de 1940, Prados se muestra desanimado: "Unos piensan que todo ha de pasar y hemos de volver a ser de nuevo. Usted sabe que no, Guillén (...) Hoy estamos con todos dentro de una gran fauce cerrada. Es inútil golpear las puertas. Hay que saber que en ella estamos errantes y abrir los ojos para recibir el calor oscuro de su muerte". Las otras cuatro cartas están fechadas en diciembre de 1957, marzo de 1958 y marzo y octubre de 1959.

Otro elemento inédito que se puede encontrar en la revista es una serie de dibujos de José Moreno Villa, que decoran las portadillas de las diferentes secciones y que fueron encontrados en uno de los álbumes confeccionados en Washington por Francisco Giner de los Ríos Morales y que figuran en el archivo del autor de Los Papeles de Oaxaca en el propio centro del 27. El pintor y poeta malagueño es objeto de un ensayo en la revista, en el que el profesor de la Universidad de Carleton (EE UU) Humberto Huergo Cardoso reivindica su figura "absolutamente singular". La tercera sorpresa de El Maquinista de la Generación consiste en cinco poemas no publicados de Giner de los Ríos Morales en México entre 1941 y 1948.

Además de los documentos inéditos, la revista incluye un acercamiento histórico a las vivencias mexicanas de poetas andaluces como Moreno Villa, Emilio Prados, Luis Cernuda o Manuel Altolaguirre. "Era un deber restituir la memoria de tantos creadores que fueron despojados de su tiempo", asegura el diputado provincial de Cultura, Fernando Centeno.

Junto al repaso de la labor de los exiliados españoles en México, la revista se completa con una mirada sobre la poesía de jóvenes autores mexicanos como José Eugenio Sánchez, Carla Faesler o Julio Trujillo.