_
_
_
_
Tribuna:AULA LIBRE
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Recetario contra la endogamia

El pasado octubre apareció en esta sección de EL PAÍS un artículo titulado Uno de los nuestros... firmado por el profesor Delibes (CSIC) y 12 destacados investigadores españoles. Utilizando el símil de la famosa película de Martin Scorsese sobre las mafias italo-americanas en Estados Unidos, los autores criticaban la profunda endogamia del sistema de selección del profesorado universitario en España, así como el escaso éxito de los sistemas de habilitación y acreditación diseñados en la Ley Orgánica de Universidades (LOU, 2001) para corregir dicho problema. El intercambio de favores ("hoy por ti, mañana por mí") y los débiles requisitos exigidos para integrar los tribunales que juzgan dichas pruebas, convierten la imprescindible construcción de una universidad de calidad, acorde con nuestro nivel socioeconómico, en un proceso mediocre de apadrinamientos y servilismo.

Hacer las cosas bien resulta más rentable que hacerlas mal, sobre todo cuando opera la sana competencia
La endogamia puede ser combatida desde dentro. Sólo se necesita la firme voluntad de hacerlo

Curiosamente, el artículo estaba ilustrado con una fotografía de uno de los campus de la Universidad Carlos III, institución que combate este proceso de endogamia. Ello dio lugar a una carta al director de su Rector, Gregorio Peces-Barba, denunciando lo desafortunado de dicha ilustración gráfica. Porque creo que es necesario que el lector sea consciente de que existe una realidad diferente a la descrita por Delibes et alia en nuestro panorama universitario, comentaré en estas líneas las prácticas que, desde hace años, llevan a cabo los Departamentos de Economía de algunas universidades españolas para inmunizarse de dicha plaga.

Diversos departamentos y centros de investigación en esta disciplina (liderados por Universidad Autónoma de Barcelona -IAE/CSIC, Universidad de Alicante, Universidad Carlos III, Universidad Pompeu Fabra y CEMFI) han establecido normas internas impidiendo la contratación de sus propios doctores, pese a que provengan de programas de doctorado nacionales integrados en redes europeas de excelencia con los mejores programas de nuestro continente. Además, con el fin de fomentar la movilidad de los jóvenes investigadores, se aconseja a los recién licenciados deseosos de continuar una formación de posgrado que soliciten su admisión en los más afamados doctorados internacionales excluyendo a la universidad donde se licenciaron. Los programas de doctorado de las instituciones señaladas anteriormente tienen una alta proporción de estudiantes extranjeros, en torno al 75%, que son escogidos mediante un riguroso proceso de selección.

Esta forma de proceder se complementa con la existencia del denominado "mercado anual de trabajo (jobmarket) de los doctores en economía", en el marco del más prestigioso congreso de economistas españoles, el Simposio de Análisis Económico, celebrado en Oviedo a mediados de diciembre. Dicho mercado, donde acuden candidatos de todo el mundo y los departamentos con vacantes, fue instituido por la Asociación Española de Economía en 2000, inspirándose en actividades similares organizadas por otras asociaciones académicas de gran prestigio (American Economic Association, AEA, y European Economic Association, EEA) a las que aspiramos a parecernos. El mercado de doctores se ha consolidado desde entonces. Está apoyado por un excelente soporte informático -donde las dos partes del mercado informan virtualmente sobre sus características (http://www.econ.upf.edu/aee_job_market/)- adquirido recientemente por la EEA para fomentar un proyecto similar a nivel europeo en el contexto del Simposio.

En la pasada edición, ha contado con cerca de 120 candidatos de todo el mundo y 60 instituciones (13 españolas y 47 de otros países). El resultado es que un número creciente de universidades y centros, incluyendo algunas privadas e instituciones financieras, se incorporan cada año a este ambicioso proyecto. Todo ello se plasma en una sustancial proporción (alrededor del 30%) de investigadores extranjeros integrados en nuestros departamentos. Lo hacen a través de contratos de prueba (tenure-track) que permiten, de forma flexible, monitorizar su progreso investigador durante unos años antes de proceder a su posible consolidación en plantilla. Se contrata por la valía profesional, no por la nacionalidad o por la procedencia del centro contratante. Justo lo contrario de lo que acontece en buena parte de nuestra universidad, como bien denuncian Delibes et alia.

Por tanto, la endogamia puede ser combatida desde dentro. Sólo se necesita la firme voluntad de hacerlo, junto con la colaboración de las comunidades autónomas a través de la aprobación de contratos flexibles (como los que existen en las mejores universidades del mundo) que ayuden a integrar a los nuevos investigadores con los incentivos apropiados. El resultado es que España ocupa la cuarta posición en Europa y la novena del mundo en producción científica en esta disciplina durante la última década, y que el grupo de instituciones antes señaladas ha sido galardonado con una de las 17 ayudas Consolider-2006 (Ingenio-2010), a través de los cuales el Ministerio de Educación y Ciencia ha tratado de identificar, en todas las áreas, a los grupos de investigación más potentes en nuestro país para apoyarles financieramente. En resumen, hacer las cosas bien resulta bastante más rentable que hacerlas mal, sobre todo cuando opera la sana competencia.

Juan J. Dolado es catedrático de Fundamentos del Análisis Económico de la Universidad Carlos III y miembro del consejo ejecutivo de la European Economic Association.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_