Irán y Venezuela piden un recorte de la producción de petróleo para que no se deprecie

Irán y Venezuela propondrán nuevos recortes en la producción, tanto en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) como fuera de ella, para evitar un mayor deterioro de los precios. El presidente venezolano, Hugo Chávez, y el iraní, Mahmud Ahmadineyad, emitieron ayer en Caracas una declaración conjunta en la que anuncian que ambos realizarán esfuerzos para detener la caída del crudo en los mercados internacionales.

Ahmadineyad es el primer jefe de Estado extranjero que visita a Chávez después de la inauguración de su nuevo mandato de seis años. "Sabemos que hay demasiado crudo en el mercado, así que vamos a recortar producción y salvaguardar el precio de nuestra materia prima", dijo Chávez en el palacio presidencial de Miraflores después de firmar con su homólogo iraní 11 acuerdos que robustecen la alianza política y económica venezolano-iraní.

"Las agresiones contra Venezuela y las amenazas contra Irán vienen orientadas por el mismo interés imperialista de dominar nuestras fuentes de petróleo", añadió el mandatario venezolano. Los dos jefes de Estado acordaron constituir un fondo de inversiones conjuntas que desarrollará proyectos en ambos países y también en terceras naciones. Ahmadineyad explicó que se dará preferencia a aquellos países que están enfrentando la amenaza de agresiones imperialistas.

Proyectos conjuntos

Caracas y Teherán tienen ya en marcha varios proyectos conjuntos, entre ellos fábricas de tractores y automóviles iraníes para el mercado venezolano y una empresa mixta para la explotación de crudos extrapesados en la Faja del Orinoco. En todo caso, un alto funcionario del ministerio iraní de petróleo aseguró ayer por la tarde, en la página web del ministerio, que aún no hay decisión oficial acerca de si la OPEP se reunirá o no de urgencia en los próximos días.

Ahmadineyad llegó a Caracas el mismo día en que Chávez presentó su mensaje anual al Parlamento, durante el cual ofreció algunos detalles del plan de reestatalización de empresas que habían sido privatizadas por Gobiernos anteriores, entre ellas la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (CANTV), varias del sector eléctrico y algunos negocios secundarios petroleros.

Chávez aseguró que Venezuela recuperará su soberanía en todo el sector energético, pero aclaró que las empresas trasnacionales que actualmente operan en el país podrán continuar, si aceptan formar compañías mixtas con el Estado, como socios minoritarios. En 2006, con un cambio en la Ley de Hidrocarburos, el Gobierno obligó a casi todas las firmas extranjeras a formar empresas mixtas con el gigante estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). La mayoría aceptó las nuevas reglas, entre ellas Repsol-YPF, que explota campos denominados marginales en la región llanera.