El campo apela a Intercitrus para paliar la crisis citrícola

Las organizaciones de productores y cooperativas citrícolas apelaron ayer a la interprofesional del sector Intercitrus, donde también están representados comerciantes e industriales, para que asuma como propia la crisis que sufren los agricultores y exija subvenciones para pagar la recogida y retirada del mercado de la fruta condenada a colgar del árbol porque no tiene salida comercial. Juan Cotino, consejero de Agricultura, auspició la reunión para trasladar el problema autonómico al ámbito estatal.

Todos los representantes de las asociaciones de productores coincidieron al reclamar una urgente "declaración de crisis" del sector citrícola que favorezca la intervención de las administraciones públicas y palie la pérdida de ingresos para los agricultores. El mismo problema se extiende a las cooperativas del sector citrícola que deben distribuir entre sus socios las liquidaciones que reciben de los operadores comerciales. Si el 40% de las cosechas de una cooperativa se dejan de recoger, los ingresos de los socios bajan en la misma proporción.

Según estimaciones de Rafael Cervera, secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), "alrededor de 400.000 toneladas de cítricos de la Comunidad Valenciana se quedarán posiblemente en los árboles".

Cristóbal Aguado, presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA), sintetizó el único acuerdo alcanzado en la reunión que se celebró en la sede de la Consejería de Agricultura, "las asociaciones de productores y cooperativas de la Comunidad Valenciana vamos a intentar que Intercitrus coja la antorcha y se convierta en mesa de debate y acuerdos que busquen una gestión inteligente de la campaña".

La primera medida que debería plantear Intercitrus sería establecer la cantidad de fruta que debería retirarse del mercado para garantizar un valor mínimo a la cosecha restante. Además, Intercitrus debería plantear esa retirada para las explotaciones citrícolas de toda España.

El anfitrión, Juan Cotino, explicó a los periodistas que la Comunidad Valenciana "no es la única productora de cítricos aunque le corresponden cuatro de los seis millones de toneladas generadas en toda España", razón por la cual, siguió, si Intercitrus llegara a fijar la cantidad de fruta que debe retirarse en toda España esa propuesta "debería ser respaldada por Murcia, Cataluña, Andalucía y por el Gobierno central".

Cotino recordó que la consejería tiene previsto retirar unas 150.000 toneladas de cítricos de escaso calibre en toda la Comunidad Valenciana con una inversión de 22 millones de euros para destinarlos a zumos o piensos para el ganado, una fórmula de intervención del mercado encubierta a través de una campaña de promoción del consumo de zumos.

Miquel Oltra, portavoz de Unió-COAG, puso el dedo en la llaga al comentar que los fondos públicos destinados a la promoción y fomento del consumo de cítricos "han beneficiado a la gran distribución pero no le sirven al agricultor", el eslabón más débil de la cadena, y denunció que la Consejería de Agricultura se limite a adoptar "políticas de parcheo".

Todas las asociaciones de productores reclamaron una vez más una ley específica que garantice un margen de beneficio para el agricultor.