Baja la superficie de cultivo de la agricultura ecológica

La superficie agrícola ecológica en el campo valenciano está por encima de la media española aunque se ha reducido en los últimos años. Así, los datos del Informe sobre la Sostenibilidad en España 2006 publicado por el Ministerio de Medio Ambiente indican que la agricultura ecológica representa el 3,75% de la superficie agraria útil (SAU), cuando en el informe de 2005 (con datos de un año antes) este porcentaje era del 4,11%. La agricultura ecológica ocupa más de 30.000 hectáreas en el campo valenciano.

La Consejería de Territorio y Vivienda destacó que el porcentaje que se dedica en el territorio valenciano a este tipo de agricultura respetuosa con el medio ambiente es superior al que se registra de media en el conjunto de España (3,2% que suponen un total de 800.000 hectáreas). Esta cifra, además, muestra una tendencia creciente durante los últimos años, ya que el informe del Ministerio de Medio Ambiente marcaba en 2004 un porcentaje del 2,79%.

Pese a todo, el titular de Territorio y Vivienda, Esteban González Pons, calificó ayer en un comunicado de "muy positivos" estos datos, ya que considera que demuestran que la creciente implantación de la agricultura ecológica en la Comunidad Valenciana "reduce significativamente los impactos negativos sobre el entorno".

Los datos elaborados por el Ministerio de Medio Ambiente sitúan a la Comunidad Valenciana como sexta autonomía donde la agricultura ecológica tiene más peso, después de Andalucía (8,4%), Baleares (7,2%), Canarias (7,17%), Murcia (6,34%) y Navarra (4,22%). Medio Ambiente también recoge que los trabajadores en el sector de la agricultura ecológica, que incluye productores, comerciantes e importadores, suman 1.106 y se ha producido un incremento del 7,37% en el periodo 2004-2005, un aumento superior al de la media estatal (1%).

Sin productos químicos

El Informe sobre la Sostenibilidad en España 2006 del Ministerio de Medio Ambiente define la agricultura ecológica como modo de producción que adopta un conjunto de técnicas que excluyen normalmente el uso de productos químicos de síntesis, como fertilizantes, plaguicidas o antibióticos, con el objeto de preservar el medio ambiente y ofrecer productos naturales.

Desde el punto de vista de la sostenibilidad, en líneas generales la evolución de la agricultura ecológica es un indicador muy destacable, tanto en el aspecto ambiental, por tratarse de un modo de producción que no usa agroquímicos sintéticos, como en el aspecto socioeconómico, por la fijación de la población en el medio rural y la cantidad de personas involucradas en el sistema de producción, elaboración y comercialización del mismo, que también obtienen diversas ventajas, según destacó la Consejería de Territorio y Vivienda.