Sadam Husein dice que su muerte en la horca hará de él un "verdadero mártir"

El ex dictador Sadam Husein, que será ahorcado en los próximos 30 días tras la confirmación de su sentencia de muerte por el Tribunal de Apelaciones de Irak, hizo ayerpública una carta manuscrita en la que dice: "Me ofrezco en sacrificio. Si es la voluntad de Dios, él pondrá mi alma junto a los verdaderos hombres y mártires". En la misma carta, el condenado insta a los iraquíes, incluidas las Fuerzas Armadas y la resistencia, a "permanecer unidos" contra el enemigo, y acusa a EE UU y a Irán de estar detrás de la violencia sectaria que sufre el país.

Los abogados defensores de Sadam aseguran que la carta fue escrita poco después de que fuese condenado a muerte el pasado mes de noviembre por crímenes contra la humanidad por el tribunal que le juzgó, y contra cuya sentencia recurrió ante el citado Tribunal de Apelaciones.

El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, un islamista chií que encabeza un Gobierno de unidad nacional que incluye también árabes suníes y kurdos, se enfrenta al desafío de llevar a cabo la sentencia sin provocar tensiones sectarias y políticas. El partido Baath, el de Sadam, amenazó ayer con tomar represalias si su líder es ejecutado.

No se ha producido en Irak ningún tipo de celebración o protestas por la confirmación de la pena capital, quizás porque muchos iraquíes están preocupados con la violencia sectaria y la escasez de servicios básicos.

El Gobierno mantiene silencio sobre cuándo se producirá la ejecución, y esto ha provocado especulaciones de todo tipo, desde que será llevado a la horca en pocos días hasta que la ejecución será pública y difundida por televisión, aunque esto último es muy poco probable. El profesor Hazim al Naimi aseguró que todo parece indicar que el Gobierno de Bagdad quiere mantener el asunto alejado de los medios.

Las críticas a la ejecución de Sadam han proliferado en Europa, mientras que Estados Unidos considera un hito importante la ejecución. La Casa Blanca valoró así la ratificación de la sentencia. En el lado contrario se multiplican las críticas. El Gobierno de Berlín reiteró su rechazo a la condena a muerte y tomó "nota" de la decisión del tribunal. Respecto al proceso, el portavoz gubernamental, Thomas Steg, evitó pronunciarse y se limitó a decir que no había indicio alguno de que el juicio vulnerase el derecho vigente iraquí.

Por su parte, Francia confirmó que hay contactos entre los países de la UE. Portavoces del Ministerio francés de Asuntos Exteriores recordaron que Francia y la UE en general se han expresado a favor de la abolición universal de la pena capital, como ya hicieron en noviembre tras conocer la condena a muerte a Sadam por la matanza de 148 chiíes en Dujail en 1982 en represalia por un atentado perpetrado contra él. "Después de la confirmación de la sentencia, muchos países europeos se han manifestado en esa línea", indicaron, antes de matizar que la decisión judicial "pertenece al pueblo y a las autoridades soberanas de Irak" y de abogar por que los iraquíes trabajen "en la reconciliación nacional y favorezcan la plena soberanía del país".

En España, el gobernante Partido Socialista recalcó que todos los países de la Unión Europea están en contra de la pena de muerte, "sea quien sea" el condenado e instó a que la comunidad internacional "pida que no se ejecute" a Sadam Husein.

En la misma línea, el Gobierno indio se mostró contrario a que se aplique la pena de muerte, mientras que las organizaciones defensoras de los derechos humanos también levantaron sus voces contra la ejecución, entre ellas Amnistía Internacional y Human Rights Watch. La Federación Internacional de Ligas de Derechos Humanos pidió por su parte al presidente iraquí, Jalal Talabani, que ordene una moratoria de la ejecución.

Por otro lado, fuentes militares indicaron ayer que el Pentágono tiene previsto enviar 3.500 soldados a Kuwait a mediados de enero, donde permanecerán a la espera de pasar a Irak para reforzar las tropas allí desplegadas. Esta fuerza fue solicitada por el general John Abizaid, comandante en jefe para Oriente Próximo, y aún debe ser autorizada por el secretario de Defensa, Robert Gates. El nivel de fuerzas estadounidenses actualmente en territorio iraquí es de 134.000 soldados.

La violencia sectaria se cobró ayer la vida de 10 personas cuando un coche bomba explotó en las inmediaciones de un concurrido restaurante de Bagdad. Además de este incidente, un vehículo militar estadounidense fue alcanzado por la explosión de otra bomba, aunque no se precisó si hubo muertos o heridos.

Estos nuevos ataques se producen después de que el martes pasado la explosión sucesiva de cuatro coches bomba en la capital iraquí ocasionara la muerte de más de 41 personas y cerca de 100 heridos.