Un capitán de la Guardia Civil en la reserva mata de cuatro tiros a su novia

El capitán de la Guardia Civil en la reserva Fernando M. Z. mató la madrugada del domingo a su compañera sentimental, María Ángeles M. P., en la discoteca Valentino del municipio valenciano de Mislata. Entró en el local a la 1.20, se dirigió a la mujer, también de 60 años, y le descerrajó al menos cuatro tiros en la pelvis, el pecho y la cabeza. El hombre no opuso resistencia y fue detenido al poco. Son ya 68 las mujeres fallecidas este año presuntamente a manos de sus parejas. Los últimos casos de malos tratos se han detectado en vísperas de la Navidad.

Fernando M. Z. tenía una orden de alejamiento desde el pasado 2 de diciembre. María Ángeles lo había denunciado por agresión, motivo por el que le habían retirado su arma oficial. Según fuentes policiales, el capitán en la reserva robó el arma de su hijo, también guardia civil, y con ella se fue en busca de la mujer, que hallaba en la discoteca. Le disparó al menos cuatro veces. Murió en el acto. La investigación apunta a los celos como posible móvil del crimen.

La discoteca estaba llena cuando el agresor entró en busca de su compañera. Valentino suele ser frecuentada por gente mayor, aficionada al baile. La víctima apenas tuvo tiempo de reaccionar. Todo sucedió muy rápido. "Se oyeron tiros y dijeron que habían matado a una persona. La policía llego enseguida y nos desalojaron a todos a la calle. Me dijeron que había un cuerpo de mujer sin vida en el primer piso. Vi a dos mujeres que se desmayaron", relató ayer un hombre que se hallaba dentro de la discoteca cuando aconteció el suceso.

Algunos vecinos escucharon el "follón" que se produjo en la calle de madrugada. La discoteca Valentino no es especialmente conflictiva desde que cambió su público, elevándose la edad del mismo, según indicaron desde la Policía Local de Mislata, población de 43.000 habitantes, pegada a Valencia.

El agresor mantenía una relación sentimental con la víctima, pero no convivían, según fuentes policiales. De hecho, ella estaba radicada en la cercana población de Torrent y él solía pasar temporadas en casa de sus hijos, en Valencia y Mislata. No tenía un domicilio fijo, señalan otras fuentes.

Fernando M. Z., originario de la población conquense de Narboneta, había pasado a la reserva en la Guardía Civil al superar los 58 años. Uno de sus últimos destinos como capitán fue el Puerto de Valencia. Era un hombre de carácter autoritario, que no se ganaba la simpatía de sus subordinados, según apuntaron fuentes próximas al guardia civil. Sus dos hermanos también eran guardias civiles, informa Magda R. Brox.

El crimen se produce dos en vísperas de las tradicionales fiestas familiares de la Navidad. Sólo entre los días 23 y 24 de diciembre, la Guardia Civil detuvo a nueve personas por presuntos malos tratos en la provincia de Valencia.

En la noche del sábado, una mujer fue apuñalada en la isla de las Palmas de Gran Canaria delante de sus hijos por su ex compañero sentimental, quien le asestó 16 puñaladas superficiales en diversas partes del cuerpo, aunque no se teme por su vida, informa José Naranjo. La víctima, de 30 años, fue agredida por su ex pareja cuando se encontraba delante de sus dos hijos, uno de unos cinco años y otra de alrededor de 12, a última hora de ayer en el municipio de Santa Lucía.

El presunto agresor, que huyó tras apuñalar a la mujer y está siendo buscado por las fuerzas de seguridad, ya había sido denunciado por violencia doméstica en ocasiones anteriores, señalaron las fuentes policiales, quienes añadieron que la pareja se encontraba en trámites de separación.

La muerte de María Ángeles eleva a 68 el número de víctimas mortales por violencia doméstica durante el año, ocho más que en 2005. Las últimas cinco muertes se han producido este mes de diciembre. A pesar de estros sucesos, los meses de enero, marzo y agosto de 2006 han resultado hasta ahora los más trágicos, con nueve mujeres muertas por cada mes, informa Efe.