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El 30% de las obras de construcción presenta "riesgos graves" de seguridad

La Inspección propone sanciones por 550.000 euros tras una campaña especial de Osalan

El 30% de las obras de construcción en marcha en Euskadi presenta "riesgos graves" para los trabajadores, según los controles realizados por Osalan, el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laboral, entre el 1 de enero y el 31 de octubre pasados. Tras visitar 1.941 obras y controlar 4.056 empresas, Osalan elevó 557 comunicaciones a la autoridad laboral por riesgos graves. La Inspección de Trabajo levantó 11 actas de infracción, con propuestas de sanción por 42.000 euros. El consejero de Empleo, Joseba Azkarraga, quien facilitó ayer estos datos en el Parlamento, aseguró que, aunque la situación es "grave", Euskadi es la comunidad donde más ha descendido la siniestralidad, un 4,49%.

Azkarraga compareció a petición propia ante la Comisión de Trabajo y Acción Social del Parlamento para explicar la situación de la siniestralidad laboral en Euskadi. Los esfuerzos de la inspección se han centrado en la industria y, especialmente, en la construcción, los sectores que concentran la mayoría de los accidentes.

La campaña anual ha apreciado riesgos graves en el 30% de las obras. Los datos son aún peores si se analiza la campaña extraordinaria en la construcción, realizada entre el 15 de mayo y el 15 de junio por Osalan, y que se cerró con visitas a 542 obras en las que participan 2.145 empresas. La Inspección de Trabajo paralizó después 38 obras y levantó 133 actas de infracción, con una propuesta de sanción conjunta de casi 550.000 euros.

El 63% de las empresas visitadas fueron objeto de actuaciones por parte de la inspección. Los incumplimientos más frecuentes son los referidos a las medidas para evitar las caídas y la mayoría se registran en las obras de menor envergadura y en subcontratas.

Además del sector de la construcción, el consejero presentó los datos del plan de choque contra la siniestralidad en la industria. Como consecuencia de la visita a 708 empresas, Osalan remitió 17 informes a la autoridad laboral, que levantó dos actas de infracción con propuestas de sanción de 4.500 euros.

Casi 40.000 accidentes

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Los datos oficiales de los primeros 10 meses del año fijan en 38.396 el número de accidentes de trabajo con baja laboral, frente a los 40.199 del mismo periodo del año anterior, un 4,49% menos. De esa cifra, 38.074 fueron siniestros leves, 281 graves y 41 mortales. El consejero aclaró que, pese a que los muertos registrados fueron 41, los realmente producidos en el periodo fueron 45, diferencia debida al sistema de comunicación de partes de accidente.

Azkarraga lamentó que las empresas no interioricen la seguridad laboral dentro del proceso productivo. Criticó también que las malas prácticas de un grupo minoritario de compañías lleven a las patronales a no aceptar críticas y a cuestionar el informe de su departamento sobre el coste de los accidentes.

La popular Esther Martínez y el socialista Jesús Loza le recordaron al consejero que los datos no son buenos si se comparan cono el conjunto de la UE. Azkarraga se defendió señalando que sólo en tres comunidades autónomas ha bajado la siniestralidad y el mayor descenso se ha dado en Euskadi.

Los sindicatos replicaron después al consejero. El responsable de Salud Laboral de CCOO, Jesús Uzkudun, aseguró que el principal problema del Gobierno es su incapacidad de pactar el plan estratégico de seguridad porque no hay diálogo social. Así, sostuvo que puede haber un repunte de siniestros en cualquier momento. LAB acusó a Azkarraga de "faltar a la verdad" cuando hace un balance "triunfalista" de la siniestralidad, ya que en las estadísticas no aparecen todos los siniestros. ELA prefirió dejar sus comentarios para hoy.

De técnicos a inspectores

El Consejo de Gobierno aprobará en su reunión de esta mañana el decreto en virtud del cual 16 técnicos del Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laboral-Osalan quedarán habilitados para realizar funciones de inspección. Este decreto concederá presunción de veracidad a las resoluciones de estos técnicos, pero seguirán siendo los inspectores dependientes del Ministerio de Trabajo los que harán efectivas las sanciones que procedan.

El consejero Azkarraga explicó ayer que con este decreto el Gobierno acomete una labor en un campo que no le corresponde, al no contar con las competencias, "por responsabilidad y porque no lo hacen otros", en referencia al Ejecutivo central.

El decreto que se aprobará hoy creará también una inspección de trabajo propia para los ámbitos en los que la comunidad autónoma tiene competencia: administraciones públicas, cooperativas y minas y canteras, con cinco inspectores. Los 21 nuevos inspectores se sumarán a los 50 que ya tiene el ministerio.

Esta medida fue anunciada en su día por el propio consejero, junto con otra iniciativa: la de creación de un registro de empresas infractoras en materia de seguridad y salud laborales, previsión que ha sido recurrida por el ministerio.

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