Una votación vigilada por 110.000 soldados
La jornada electoral de ayer fue vigilada por 110.000 soldados y 18.900 miembros de la Reserva Militar, un cuerpo de seguridad creado por Chávez y calificado por la oposición como su "brazo paramilitar".
Las convocatorias del presidente a un relevo a la fuerza todavía se escuchan en algunos francotiradores. Uno de ellos fue el periodista Rafael Poleo, editor de la revista Zeta, que optó por viajar a Estados Unidos este año, después de haber difundido el pasado 6 de noviembre un plan para expulsar al jefe de Gobierno.
Poleo abogó, en una entrevista por televisión, por el "método ucraniano" [es decir, la toma de las calles por la oposición de Ucrania en noviembre del año 2004 para rechazar los resultados de las elecciones]. Dando por supuesto que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunciaría la victoria de Chávez, instaba a salir hoy masivamente a la calle a los gritos de "¡fraude!".
"Hay terroristas y golpistas. Están vivitos y coleando y están identificados, los conocemos. Y les advierto de que cualquier intento por desestabilizar y por crear problemas, va a tener una respuesta contundente del Estado", declaró entonces el vicepresidente, José Vicente Rangel.
El jefe de Gobierno agregó que "lo que hizo [Rafel Poleo] es inadmisible en un Estado de derecho. Ese señor debería haber sido detenido al salir de la emisora". Para Vicente Díaz, miembro del CNE, no había posibilidades de que pasara "nada distinto de unas elecciones en calma. Habrá un ganador y un subcampeón, y ambas partes reconocerán el triunfo".
Una victoria ajustada de los dos candidatos presidenciales, Hugo Chávez y Manuel Rosales, hubiese podido causar su desconocimiento por los flancos ultras del Gobierno o de la oposición, y choques de consecuencias graves, porque las armas abundan en los dos bandos, según temen la mayoría de los analistas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.