Normalidad en el resto de provincias en la primera noche sin botellas

Las dos primeras noches en las que se ha aplicado la ley antibotellón han transcurrido con normalidad en la mayoría de provincias andaluzas. En Huelva, donde el Ayuntamiento ha establecido un área comercial de la barriada de Zafra para que los jóvenes beban, hubo una concentración "no excesivamente grande" en el lugar del nuevo botellódromo, según informaron los vecinos de esta zona, quienes aseguraron que "no se produjo ningún tipo de problema". Estos vecinos, no obstante, se oponen a la ubicación del botellódromo y han anunciado protestas.

En Málaga, el delegado de la Junta de Andalucía, José Luis Marcos, aseguró ayer que "en general" no se han producido incidencias importantes y señaló que los ayuntamientos de la provincia "no han planteado problemas" desde la aplicación del decreto.

Por su parte, Granada vivió anoche con normalidad y sin incidentes las dos primeras jornadas con la ley en funcionamiento. Fuentes de la Policía Local explicaron que unas 3.000 personas se concentraron el viernes en un gran botellón en la explanada frente al Hipercor, donde el Ayuntamiento ha autorizado, mediante bando municipal, este tipo de concentraciones. Según la policía, se registraron pequeñas concentraciones de jóvenes consumiendo alcohol en la vía pública en otras zonas de la ciudad, pero se disolvieron "con normalidad" a la llegada de los agentes que destacaron la actitud "pacífica" de los jóvenes.

En Sevilla, donde entre las 2.30 y 3.00 de la madrugada se produjo un incidente entre los agentes y los clientes de un bar, el resto de la noche transcurrió con normalidad. Cinco puntos catalogados como "saturados de ruidos" fueron vallados. Los agentes requisaron bebidas y dispersaron a los jóvenes que se reunieron en zonas céntricas o habituales del botellón como la plaza del Museo, la avenida Cardenal Bueno Monreal o Felipe II, y los derivó a otras partes más aisladas de la ciudad, como el descampado del recinto ferial o la Cartuja. Muchos jóvenes hicieron caso a los agentes y se retiraron a estas zonas para reunirse y beber.