UGT pide que rumanos y búlgaros no trabajen en España hasta 2009

UGT fijó ayer en dos años el plazo "conveniente" para permitir a los rumanos y búlgaros -ciudadanos comunitarios a partir del 1 de enero de 2007- acceder al mercado de trabajo español. El sindicato opina que retrasar su entrada al mercado laboral español permitiría a Rumanía y Bulgaria "seguir mejorando" y alcanzar los niveles socioeconómicos "aceptables", según la responsable del área de migraciones de UGT, Ana María Corral.

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, manifestó ayer que el Gobierno aún no había tomado una decisión al respecto y las asociaciones de inmigrantes búlgaros y rumanos residentes en España, contrarias a una moratoria que consideran injusta, confían en que el Ejecutivo desoiga las recomendaciones de los sindicatos.

"Se hizo lo mismo en la anterior ampliación de la Unión Europea y los resultados fueron muy positivos. La moratoria garantiza los derechos de los trabajadores y permite una llegada normalizada de los trabajadores de los nuevos miembros. Cuando España entró en la UE pasó lo mismo, nos pusieron una moratoria de siete años, y durante ese tiempo la Unión Europea hizo muchos esfuerzos para que España alcanzase los niveles socioeconómicos adecuados.", explica Corral.

Temor a la avalancha

Para las asociaciones de inmigrantes rumanos y búlgaros residentes en España resulta "paradógico" que un ciudadano comunitario, con derecho a vivir y votar en la Unión Europea no pueda trabajar por cuenta ajena en España. "Los sindicatos temen una avalancha de rumanos que no se va a producir. Las cosas empiezan a ir bien en Rumanía. Los sueldos suben, porque quedan pocos trabajadores y por ejemplo, ¡es dificilísimo encontrar albañiles en Rumanía!No sé a qué le tienen miedo", explica Gheorghe Gainar, presidente de la Asociación Cultural de Ayuda e Integración al Pueblo Rumano.

"Son temores infundados. Por lo que sé, no hay grandes multitudes de búlgaros preparando su viaje a España a partir del 1 de enero. La petición de UGT no nos sorprende. Ya nos pegaron el susto. La gente se alarmó mucho. Ahora toca esperar la decisión del Gobierno", añade Tihomir Nikolov Batolski, representante de la Asociación de inmigrantes Búlgaros en España AIBE-Balcan.

"Establecer un periodo transitorio no es impedir que vengan. Proponemos que se flexibilice el reglamento de Extranjería y que Rumanía y Bulgaria pasen a ser destinos preferentes para las ofertas de empleo de contingente o contratación en origen frente a los ciudadanos no comunitarios", afirma Corral.

En España viven cerca de 189.000 rumanos con tarjeta de residencia y otros 200.000 sin papeles, según las asociaciones de inmigrantes. Los búlgaros regulares son cerca de 55.000.