Centenares de personas exigen parar las obras del puerto de Altea

Ecologistas en Acción de la Marina Baixa consiguió reunir ayer a varios centenares de personas en Altea en una nueva protesta contra las obras de ampliación de puerto deportivo Luis Campomanes. Los manifestantes exigieron a la Consejería de Territorio que haga "definitiva" la paralización y emita sanciones a la empresa promotora, Marina Greenwich.

La jornada discurrió en tono festivo tras haber conseguido con la última protesta de hace un mes que se hiciera efectivo el decreto de paralización de las obras. Carlos Arribas, portavoz de los ecologistas, criticó a la mercantil concesionaria del servicio por desobedecer las dos órdenes de paralización de las obras emitidas por la Generalitat y censuró los trabajos por el "gravísimo daño" al medio ambiente en la bahía de Altea. También acusó de "connivencia" con la promotora a la administración y mostró su temor a que en breve se inicien de nuevo los trabajos.

Marina Greenwich pretende duplicar el actual número de amarres en el puerto, hasta alcanzar los 940, y se encuentra ubicado en la zona del Mascarat, entre Altea y Calp. Territorio impuso una serie de condicionantes para realizar la ampliación, entre los que figura el trasplante de la pradera de Posidonia.