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Un muerto y 26 afectados por legionela en la región en las últimas cinco semanas

Un porcentaje elevado de contagiados trabaja en el sector del taxi o del transporte

Oriol Güell

La Consejería de Sanidad investiga si la región se encuentra en los albores de un brote epidémico de legionela tras registrar 27 casos en las últimas cinco semanas, casi los mismos (32) que los ocurridos en los 10 primeros meses de 2006. Al menos cinco personas han sido ingresadas en la UCI y un hombre de 37 años ha muerto en el hospital de Móstoles. Sanidad ha alertado a los hospitales para que investiguen cualquier ingreso por pulmonía, e inspecciona 50 torres de refrigeración. Según fuentes sanitarias, entre el 20% y el 40% de los afectados trabaja en el sector del taxi o del transporte.

"El aumento de casos es muy significativo en las últimas semanas", admite Francisco Marqués, subdirector de Epidemiología de la Consejería de Sanidad. "Pero aún no podemos afirmar si se trata de un brote epidémico o de una agregación de casos aislados fruto del azar", añadió.

Sanidad tiene algunos argumentos a favor, pero otros en contra, para concluir la existencia de un brote de legionela, un tipo de neumonía grave causada por una bacteria. A favor está el súbito aumento de casos de las últimas semanas.

Aunque es habitual que de vez en cuando se registre algún enfermo aislado -una media de 0,78 a la semana en la región desde principios de año hasta mediados de octubre-, las cifras se han disparado desde la semana que empezó el lunes 16 de octubre, la número 42 del año. En aquellos siete días, siete personas fueron ingresadas en los hospitales públicos por legionela. En las cuatro siguientes, fueron atendidos por la enfermedad, respectivamente, cuatro y seis personas, respectivamente. Y el pasado lunes fue diagnosticado el último caso.

Primer fallecimiento

Ese mismo lunes se registró el primer fallecimiento de este posible brote, "un hombre de 37 años que murió en el hospital de Móstoles". "Era una persona que tenía otros problemas de salud asociados, como el sistema inmunológico débil", explican fuentes del hospital.

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Como suele ser habitual en los brotes de legionela, la mayoría de los enfermos son hombres -en proporción tres a uno- con edades comprendidas entre los 29 y los 70 años. Aunque Marqués reconoce que "se trata del mayor incremento de los últimos años", apunta que otros datos "invitan al optimismo". "En los dos últimos días no ha sido notificado ningún caso", lo que "podría significar que el aumento de la incidencia esté llegando a su fin".

Otro dato importante es "la gran dispersión de los casos registrados hasta ahora". "Los brotes epidémicos se caracterizan por una concentración geográfica de los afectados, que suelen vivir o trabajar muy cerca unos de otros. En este caso, en cambio, los enfermos residen en toda la región, excepto el Corredor del Henares", explican desde Sanidad.

En el área atendida por el hospital Gregorio Marañón (sureste de la capital y la región) se han registrado cuatro casos. En la zona norte (hospital de La Paz), uno; tres al noroeste de la región (Puerta de Hierro); y 14 en el sur, desde los barrios que rodean al hospital 12 de Octubre hasta Aranjuez.

Según Marqués, "esto descartaría un foco común, aunque aún lo estamos investigando". Las pesquisas se centran en averiguar los lugares en los que han estado -por motivos de trabajo, ocio u otros- todos los enfermos en los últimos 10 días, periodo máximo de incubación de la neumonía por legionela. "Todos estos datos los dibujamos en un mapa y vemos si hay alguna zona específica en la que los enfermos hayan estado. Si fuera así, tendríamos una pista importante de donde puede estar alguna torre de refrigeración o fuente de agua que libere microgotas de agua en la atmósfera, posible foco del brote", informan desde Sanidad. "Pero hasta el momento no ha sido así, sólo tenemos algunas zonas en las que han estado sólo una parte de los enfermos".

Sanidad ha localizado en estas zonas unas 50 torres de refrigeración de las 4.000 censadas que existen en la Comunidad de Madrid. "Vamos a vigilar estas torres, solicitando que cumplen la normativa vigente de control de la legionelosis y haciendo inspecciones", añade Marqués.

Éste confirmó que "una parte de los afectados" -entre un 20 y un 40%, según otras fuentes- son taxistas o personas que trabajan en el sector del transporte. Esto, según estas fuentes, obliga a "extremar las precauciones porque es gente que se mueve mucho por toda la región y podría dificultar el hallazgo de un foco de la enfermedad".

Agua estancada, 'jacuzzis' y movimientos de tierras

La bacteria de la legionela es común en los cursos lentos de los ríos y las aguas estancadas. En estos lugares, sin embargo, no es peligrosa para el hombre ya que no se contagia por contacto con la piel ni tampoco por beber agua contaminada.

El gran peligro de la bacteria es cuando coloniza torres de refrigeración u otros mecanismos que contengan agua a temperaturas templadas -lo que favorece la multiplicación de las bacterias- y que suelten a la atmósfera gotas microscópicas de agua con la bacteria a bordo.

Estas gotitas son las que alcanzan los pulmones de la persona y en un plazo de 2 a 10 días pueden causar una pulmonía grave e incluso mortal. La legionela, que no se contagia entre personas, afecta más a hombres que a mujeres y es especialmente letal en personas con otros problemas de salud -diabetes, sida, enfermedad obstructiva crónica...-.

Los mayores brotes de legionela -el último ocurrido en la región data de 1996, cuando 260 personas enfermaron y 16 murieron en Alcalá de Henares- suelen estar causados por torres de refrigeración o conducciones de aguas contaminadas por la bacteria de la legionela.

Pero numerosas investigaciones han demostrado que aumenta la incidencia de la enfermedad cerca de las zonas en las que se producen movimientos de tierras, ya que la bacteria también vive en los suelos húmedos.

"Estamos investigando todas las hipótesis y por el momento no hemos podido descartar ninguna", explica Francisco Marqués, subdirector de Epidemiología de la Consejería de Sanidad.

La misma bacteria que produce la legionela causa en otras ocasiones, sin que se sepa exactamente por qué, otra enfermedad más leve, parecida a una gripe y sin afectar a los pulmones. Se denomina Fiebre de Pontiac y los técnicos de Sanidad se llevaron una gran sorpresa hace tres años al encontrarse a toda una familia, residente en un municipio cercano a la carretera de A Coruña, afectada por la enfermedad. Las investigaciones revelaron que el origen del brote era el jacuzzi que se acababan de instalar en casa.

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Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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