Homenaje a la capitalidad de Valencia durante la República

En un escenario con sendas y grandes banderas republicanas a cada lado, se celebró ayer en el Colegio San Onofre de Quart de Poblet un acto de homenaje con motivo del 70 aniversario de la capitalidad republicana de Valencia. Unos centenares de personas asistieron al intenso programa de actividades que se abrió por la mañana con la recepción de las organizaciones republicanas y continuó por la tarde, tras la "paella de confraternidad republicana", según denominación de la propia organización.

Por la tarde, tuvo lugar una mesa redonda sobre la llegada del Gobierno que dio paso al acto central, Homenatge a la República, en el que hubo numerosas intervenciones, si bien no asistieron como estaba previsto Quico Pi de la Serra, José Luis Sampedro, José Luis Labordeta ni Maria del Mar Bonet.

Especialmente emotivo fueron los parlamentos de Alegría Just, hija del ministro valenciano de Obras Públicas, Juli Just, y de Leonor Fabra, hija del sargento republicano Carlos Fabra Martín, que tomó el mando en el acuartelamiento de Paterna y con un pelotón de cabos y soldados abortó la rebelión militar contra la segunda República a la que iban a sumarse jefes y oficiales del Batallón de Zapadores y Minadores, acantonado en la ciudad valenciana. Ambas relataron sus experiencias en el exilio. La hija del sargento Fabra, además, realizó una sentida reflexión sobre la laicidad del Estado, sobre la democracia moderna y sobre Europa.

Se vieron numerosos dirigentes de Esquerra Unida entre los asistentes al acto de homenaje. Entre ellos, a la coordinadora de la coalición, Glòria Marcos, y la concejal de Valencia, Victoria González. También saludó al público la alcaldesa de Quart de Poblet, la socialista Carmen Martínez. Un grupo de dolçaina amenizó la jornada tocando el himno republicano y otras composiciones de significación política.

La actriz Rosana Pastor, que participó y presentó el acto, junto a la periodista Rosa Solbes, realizó un llamamiento a la unidad de la izquierda, en un momento en que las negociaciones entre EU y el Bloc se encuentra estancadas y no fructifican.