A las puertas de Europa

La economía búlgara ha cumplido con sus deberes para ingresar en la Unión Europea en enero de 2007. El país, cuyo PIB crecerá un 6% este año, ha terminado con el déficit fiscal y está inmerso en un ambicioso plan de reducción del aparato estatal y privatizaciones. El Ejecutivo confía en el despegue de la inversión extranjera, aunque mira con cautela el alza de la inflación.

La tasa de paro ha caído al 8,4% en septiembre, algo que puede evitar una emigración masiva hacia los demás países de la Unión Europea

La economía búlgara ha logrado ajustar sus cuentas fiscales, terminar con el déficit y mejorar las condiciones para la inversión extranjera

La Comisión Europea ha confirmado finalmente el ingreso de Bulgaria a la Unión Europea después de casi siete años de negociaciones. El anuncio, que se ha producido en medio de un proceso electoral, ha significado un espaldarazo para la economía búlgara, con un crecimiento promedio del 6%, muy superior al 2,7% esperado para la UE en 2006. A pesar de que las recientes elecciones deberán ser repetidas, se ha confirmado el triunfo del candidato oficialista pro europeo Gueorgui Parvanov, lo que garantiza la buena marcha de la adhesión.

Durante esta década, la economía búlgara ha logrado ajustar sus cuentas fiscales, terminar con el déficit, mejorar las condiciones para la inversión extranjera, consolidar un plan de privatizaciones y reducir las regulaciones en sectores claves. Desde 2000, Bulgaria ha crecido por encima del 4%, llegando hasta el 5,6% en 2004. Este dinamismo se ha producido gracias a su condición de socio privilegiado de Europa. El 60% del comercio exterior búlgaro se realiza con la Comunidad.

Inversiones extranjeras

Para este año indican que las inversiones extranjeras crecerían entre un 14% y un 19% en 2007, después de crecer casi un 22% durante el curso pasado. Bulgaria es un país plenamente integrado en al estructura económica europea, con empresas suministradoras que conocen el mercado comunitario y atractivas ventajas tributarias. Según el último informe de la UNCTAD, Bulgaria ocupó en 2005 el noveno lugar en el índice que refleja la inversión extranjera directa.

Bulgaria también ha logrado controlar el déficit fiscal, el gran dolor de cabeza de los países de Europa del Este. El Gobierno ha puesto en marcha planes de racionalización del gasto para reducir las presiones en la balanza por cuenta corriente. Este plan ha sido complementado con la venta de medios de comunicación y empresas claves de sectores productivos, además de la reducción progresiva de los impuestos aplicados a la inversión extranjera. Esto ha generado un superávit fiscal del 3,5% para este año y de un 1,7% para 2007.

Menor desempleo

El empleo es otro de los índices que favorecen la entrada de Bulgaria a la UE. El desempleo ha caído al 8,4% en septiembre. Este índice ha estado debajo del 9% que se venía registrando en los últimos tres meses, y está por debajo del 10,5% registrado el mismo mes del año anterior. Esto ha significado que los indicadores de empleo crezcan hasta el 47,1%, casi dos puntos sobre el segundo trimestre del año pasado. Tener tasas de empleo estables es fundamental para evitar la masiva emigración búlgara hacia sus nuevos socios europeos.

Con todo, el mayor temor del mercado es que el índice de precios del consumidor se dispare en Bulgaria después de la adhesión de la UE, debido a la masiva llegada de capitales extranjeros y el aumento del comercio exterior. El propio Gobierno se ha encargado de hacer un llamado a la calma, asegurando que existen los mecanismos monetarios necesarios para evitar alzas descontroladas. En 2005, los precios se elevaron un 5%, mientras que las previsiones indican que en 2007 crezcan un 4%, para ralentizarse hasta un 3% en 2008. La media de la UE es del 2,5% anual.