Alonso admite que "se ha revuelto el avispero" en Afganistán

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, admitió ayer que se ha producido un "deterioro general de la seguridad" y un "recrudecimiento de la violencia" en Afganistán, aunque dijo que la situación es comparativamente mejor en la zona oeste, donde están los militares españoles. Fernando López-Amor, del PP, sugirió que se aumenten las tropas o se retiren; mientras que Gaspar Llamazares, de IU, pidió un calendario de repliegue.

Alonso compareció ante la Comisión de Defensa del Congreso para informar del atentado en el que murió el soldado español de origen peruano José Arnaldo Hernández Seminario, el pasado 8 de julio, y de otros tres ataques contra las tropas españolas en Afganistán, todos sin víctimas.

Explicó que la muerte se produjo por la explosión de una mina contracarro, con 3 o 4 kilos de TNT, cuya autoría atribuyó a "un grupo de talibanes". La investigación corresponde a la policía afgana, añadió, no sin advertir que es "difícil que vaya a llegar a resultados concluyentes".

"La tendencia general ha venido siendo la de un deterioro de la seguridad", reconoció el ministro, quien atribuyó esta situación a que "se ha revuelto el avispero", al extenderse la OTAN al sur: "La inseguridad se dispersa conforme se eliminan refugios y zonas donde los talibanes, miembros de Al-Qaeda y otras redes actuaban con mayor libertad".

Pese a ello, aseguró que no se ha interrumpido la reconstrucción y que la zona oeste, donde están las tropas españolas, "ha sufrido menos deterioro, si la comparamos con el resto del país".

Frente a las presiones para que los soldados españoles refuercen el sur, subrayó que "cualquier actuación de nuestras tropas fuera de la zona que tienen asignada sólo puede producirse con autorización específica de las autoridades españolas". Lo que no implica, matizó, "denegación de auxilio en casos extremos"; o que no acudan, como ya han hecho, "a retirar heridos".

Fernando López-Amor, del PP, se quejó de la "opacidad informativa" del Gobierno y advirtió: "Si se necesita desplegar más soldados por razones de seguridad, habrá que pensarlo. Hay que pensar en incrementar las dotaciones o en marcharnos de allí. No podemos estar con pocas fuerzas que no puedan garantizar su propia seguridad".

Gaspar Llamazares, de Izquierda Unida, pidió al Gobierno que "ponga sobre la mesa de manera urgente un calendario de retirada de las tropas".