Las mujeres ganan de media 5.521 euros menos al año que los hombres

Un trabajador español gana, de media, 16.018 euros. Pero esta cuantía, que representa un avance de 360 euros con respecto al año anterior, varía mucho en función del sexo del empleado. La retribución de las mujeres no acaba de acortar distancias de forma significativa con la de los hombres: la diferencia es de un 30%, que traducida en dinero equivale a 5.521 euros menos, según se desprende de la información de las declaraciones de la renta de los contribuyentes sobre 2005 difundida ayer por la Agencia Tributaria. Hacienda atribuye a la regularización de inmigrantes el aumento del número de asalariados, que sumaron casi un millón más en 2005.

La estadística Mercado de trabajo y pensiones en las fuentes tributarias de 2005 difundida ayer viene a ser una radiografía del bolsillo de los ciudadanos, ya tengan un empleo, cobren una pensión o estén en el paro.

De entrada, pese a que el número de mujeres asalariadas aumentó en 450.000 el año pasado, esta cifra fue superada por la de los hombres que se incorporaron al mercado de trabajo (588.000), de modo que el peso de unas y otros se mantuvo estable. Las primeras suponen un 42% del total de asalariados, frente al 58% de trabajadores de sexo masculino.

La retribución de las mujeres creció, de media, más que la de los hombres (un 3,03% frente a un 1,99%). De media, los salarios avanzaron en 2005 un 2,3%, hasta situarse en los mencionados 16.018 euros. Es menos de lo que se incrementaron las retribuciones de los pensionistas (6,22%, hasta los 9.604 euros) y las de desempleo (4,28%, hasta los 4.290 euros).

La diferencia en el ritmo de incremento de los salarios de hombres y mujeres permite afirmar que la distancia entre sus retribuciones respectivas va disminuyendo, aunque de forma muy lenta. Hace cinco años, la diferencia salarial que jugaba en contra de las mujeres era del 32,6%, porcentaje que ha bajado ahora al 30%.

Las estadísticas de la Agencia Tributaria no especifican si esta discriminación salarial se produce cuando un hombre y una mujer desempeñan una misma tarea. Tradicionalmente, las mujeres suelen sufrir una segunda discriminación: la de no ascender con la misma facilidad que los hombres a los puestos de mayor responsabilidad.

Otro de los aspectos destacables de las estadísticas es el del aumento del número de asalariados y de asalariados-pensionistas. Al primero de estos colectivos se le sumaron en 2005 hasta 937.068 personas más, de modo que en total aumentó un 6,7%. En el segundo caso, el avance proporcional fue aún mayor, del 9,9%, con 90.261 personas más. El informe estadístico de Economía y Hacienda subraya el aumento en casi un millón de nuevos asalariados que ha tenido lugar, y señala a este respecto que esta tendencia se ha visto "sin lugar a dudas" afectada por el proceso de regularización de inmigrantes llevado a cabo durante este periodo.

La aportación de los trabajadores extranjeros a la economía es uno de los grandes temas de debate que vive España en este momento, y ha habido estudios como el que recientemente publicó Caixa Catalunya que sugieren que, sin la inmigración, la renta per cápita española, uno de los indicadores clave para conocer el desarrollo y bienestar de una sociedad, hubiera incluso retrocedido en los últimos años.

Más 'mileuristas'

Cabe destacar también que la vida laboral de los trabajadores se alarga. En 2005 había nada menos que un 15,8% más de asalariados con una edad superior a los 65 años (183.126 personas). Por el contrario, la cifra de menores de 18 años que trabajan se ha reducido un 5,58% (suman 171.119).

Buena parte de los nuevos trabajadores -un 30% de ellos encontraron trabajo de forma sintomática en el sector de la construcción y los servicios inmobiliarios- sufren de mileurismo. "Prácticamente el total de las personas que se han incorporado al mercado laboral en 2005 cobran menos de dos veces el salario mínimo interprofesional (SMI)", apunta la Agencia Tributaria. Considerando que el SMI es de 513 euros al mes, la retribución mensual apenas supera los mil euros mensuales. Como contraste, cada vez hay menos trabajadores que cobren más de cuatro veces el salario mínimo.