Detenido un ginecólogo por abusos sexuales a pacientes

Un ginecólogo de un centro de asistencia primaria de Barcelona fue detenido el lunes por los Mossos d'Esquadra acusado de abusar sexualmente de varias de sus pacientes. La denuncia de una de ellas desencadenó la investigación. A partir del listado de las mujeres, los mossos las interrogaron y algunas aseguraron que habían sufrido abusos del facultativo y que no lo denunciaron en su día por pudor.

El médico detenido, Sami Y. A., de 55 años, de origen jordano pero nacionalizado en España, trabajaba desde hacía tres años en el centro de asistencia primaria Río de Janeiro, en el distrito de Nou Barris de Barcelona. El facultativo permanecía ayer en las dependencias de la policía autonómica y pasará mañana a disposición judicial. Un portavoz de la policía autonómica explicó ayer que apurarán las 72 horas previstas por la ley con el fin de completar el atestado policial con todas las declaraciones que sean posibles.

Las investigaciones policiales se iniciaron el pasado 16 de septiembre, a raíz de la denuncia presentada por una paciente de Sami Y. A. que le acusaba de haberle realizado tocamientos fuera de lugar durante un reconocimiento médico.

Los mossos consideraron que una sola denuncia no era suficiente para proceder a la detención del ginecólogo y se hicieron con el listado de todas sus pacientes. A partir de esa relación, la policía autonómica empezó a tomar declaración a las mujeres y fue entonces cuando varias de ellas relataron que también habían sufrido abusos durante las visitas médicas, aunque no se habían atrevido nunca a denunciarlo. Después de esa declaración "unas cuantas" de estas mujeres cambiaron de parecer y presentaron denuncia contra al ginecólogo a instancias de los mossos.

Nuevas declaraciones

La policía declinó ayer cuantificar el número de mujeres que han corroborado los supuestos abusos sexuales, argumentando que las declaraciones continuarán hasta mañana y que es probable que surjan más casos.

Una de las pacientes que ha declarado ante los mossos explicó ayer a la agencia Efe: "la primera vez que le visité recibí un trato especial y cuando me llamaron los mossos empecé a atar cabos: la exploración fue más exhaustiva de lo normal". "Nunca pensé que una cosa así podía ser, nunca te imaginas que un médico pueda hacer algo así", agregó. Otras dos pacientes del mismo doctor explicaron, sin embargo, que el trato que recibieron del médico "fue muy correcto y amable".

El Instituto Catalán de la Salud (ICS), del que depende el centro de asistencia primaria Río de Janeiro, abrió ayer un expediente informativo para "aclarar" lo ocurrido, "siempre respetando la presunción de inocencia del profesional". El ICS se ha puesto "a disposición de la policía" para colaborar en las investigaciones.

La consejera de Interior de la Generalitat catalana, Montserrat Tura, explicó ayer que "respetando la presunción de inocencia", la policía autonómica ha considerado "creíbles" las acusaciones de algunas de pacientes. También mostró su confianza en que la difusión del caso ayude a que denuncien más mujeres.