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El Ayuntamiento tarda 94 días en tramitar las ayudas sociales urgentes

El PSOE y trabajadores sociales critican que la gestión es muy larga y engorrosa

Jesús Sérvulo González

Una familia que necesite una ayuda social urgente (para alimentarse o alojarse) tarda una media de 94 días en cobrar del Ayuntamiento de Madrid, según datos del PSOE recabados en todas las juntas. Asuntos Sociales asegura que se recibe la prestación de forma inmediata, aunque reconocen que los trámites se prolongan tres meses. "Estas ayudas tienen que ver con el comer y el dormir, la demora es excesiva", afirma el edil socialista Pedro Zerolo. Trabajadores sociales municipales critican el modelo: las prestaciones se tratan como subvenciones y la tramitación es muy engorrosa.

"Un incendio en una de las casas de un poblado chabolista sin seguro, es lo habitual, sería un desastre", explica una trabajadora social municipal que no quiere dar su nombre. Como otros compañeros teme represalias laborales.

"La familia necesitaría un sitio donde dormir, dinero para comer, y cubrir sus necesidades básicas, como comprar pañales para los críos... Pero esta familia no podrá recibir una ayuda del Ayuntamiento para esta situación de emergencia en menos de tres meses", añade la misma trabajadora social.

Las ayudas de emergencia que concede el Ayuntamiento de Madrid para personas en situación de extrema necesidad tardan 94 días en cobrarse, según denuncia el PSOE, de acuerdo con datos recabados en cada una de las 21 oficinas de Asuntos Sociales municipales.

El concejal socialista responsable en materia de Asuntos Sociales, Pedro Zerolo, denuncia que "estas ayudas tienen que ver con el dormir, con el comer y con las necesidades básicas. Pero tardan mucho en cobrarse". Zerolo critica "la falta de apuesta por lo público y por lo social del Ayuntamiento".

7.363 ciudadanos atendidos

La ordenanza municipal establece que las ayudas de emergencia deben concederse en el plazo de un mes desde que se solicitan. El Ayuntamiento reconoce que el periodo medio de tramitación se prolonga durante tres meses. "Los servicios se prestan de forma inmediata. Los usuarios reciben un tratamiento rápido", explica un portavoz municipal. "Pero no las cobran los ciudadanos, sino los propietarios de los hostales, o los proveedores que prestan los servicios". El Ayuntamiento invirtió durante el año pasado 2,4 millones de euros en ayudas, un 44,19% más que el año anterior. Además, prestó servicio a 7.363 ciudadanos.

Pero los trabajadores sociales municipales no opinan lo mismo. "Hay ayudas que no requieren inmediatez, pero hay otras... Las ayudas de emergencia no existen porque se demoran mucho. Tenemos que mandar a algunos ciudadanos a organizaciones como Cáritas para que resuelvan el problema con rapidez", explica una trabajadora de una oficina municipal. El problema, según los trabajadores sociales, está en que "las ayudas económicas que durante toda la vida se han dado a las familias con dificultades están reguladas por la Ley de Subvenciones y están sometidas a un procedimiento muy farragoso".

Las ayudas de emergencia son aquellas que se conceden para hacer frente a las necesidades básicas de alojamiento, alimentos, medicinas, gafas o audífonos, para personas en riesgo de exclusión social. También se conceden para sufragar pequeños arreglos imprescindibles en la vivienda habitual a personas con necesidades.

Algunos trabajadores sociales cuentan que el procedimiento para solicitar una ayuda de emergencia comienza con "la solicitud de la instancia; en segundo lugar, se hace una valoración de la situación, luego se reclama documentación y justifica la concesión de la ayuda. Todo este procedimiento se prolonga durante más de tres meses", explica uno de los trabajadores sociales municipales. Éste recuerda la situación de una mujer que se queda viuda, el marido aportaba poco dinero al hogar y estaba en situación irregular. "Mientras arregla su situación y reclama la pensión de viudedad, pasa mucho tiempo y necesita ayuda. Es una situación límite".

Los trabajadores sociales no sólo se quejan del retraso en el cobro de las ayudas de emergencia. "En Madrid hay distritos de más de 150.000 habitantes donde sólo hay una oficina municipal de Asuntos Sociales", apuntan.

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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