Medio Ambiente busca la forma de evitar nuevas inundaciones en las químicas de Tarragona
El 70% de la cosecha de avellanas se lo han llevado los aguaceros
Francesc Baltasar, titular del Departamento de Medio Ambiente y, como tal, responsable de la Agencia Catalana del Agua (ACA), acordó ayer reunirse con representantes de la industria química de Tarragona con el fin de elaborar un diagnóstico de la situación creada por el desbordamiento de las rieras y afrontar "soluciones económicamente viables" para evitar inundaciones. La patronal química lleva años pidiendo la canalización de dos rieras que atraviesan el polígono Sur de Tarragona, el que está junto al mar. La inundación de las instalaciones ha obligado a parar la producción y ha ocasionado pérdidas millonarias a las empresas.
Al margen de la reunión con las empresas químicas, la Generalitat convocará también a los alcaldes de los municipios del Camp de Tarragona más afectados por las inundaciones urbanas, con el objetivo de planificar las actuaciones necesarias para prevenir avenidas como la de los últimos días.
La Asociación Empresarial Química de Tarragona (AEQT), la patronal del sector, arremetió ayer contra la ACA por la demora en la canalización de las dos rieras que atraviesan el polígono Sur. Este complejo permanecía ayer completamente enfangado y con las principales empresas paradas, acumulando pérdidas millonarias por las que estudiarán reclamar a la Administración. El actual Gobierno autónomo y los anteriores de CiU desde 1992 conocían la posibilidad de que el polígono petroquímico se inundara y el agua arrastrara contaminantes, como ha ocurrido esta semana. Las inundaciones generaron una mancha de hidrocarburos en el litoral que ayer quedó totalmente disuelta.
Problemas en Repsol
"Hace 14 años que deberían haber canalizado las rieras", señalan fuentes de la multinacional alemana Basf, que añadían que estas rieras, a su paso por el interior del complejo, permanecen limpias todo el año, mientras que en los tramos anteriores se acumulan los escombros.
La delegada de la Generalitat en Tarragona, Núria Segú, aseguró ayer que el Ejecutivo resolverá "definitivamente" la canalización de estas rieras, aunque fuentes de Medio Ambiente señalan que una mera canalización puede no solucionar el problema de desbordamientos en episodios de lluvias "extraordinarias" como el reciente.
El desbordamiento de estas dos rieras, la Boella y la Beurada, ha provocado la completa inutilización del pantalán y los depósitos de combustible de Repsol. La empresa recibe el petróleo crudo por mar y lo impulsa hasta la refinería de La Pobla de Mafumet, en el polígono Norte, 14 kilómetros arriba. Ahora este proceso es imposible debido a la avería del sistema de bombeo y del entramado eléctrico. Fuentes de la compañía aseguran que están acumulando pérdidas de 340.000 euros diarios y que ésta se ha visto obligada a reducir la producción de gasolina para no tener que parar la planta, lo que generaría mayores pérdidas.
Ayer, día en que no llovió -de hecho, no llueve desde el jueves por la mañana en el Camp de Tarragona- y las carreteras ya estaban abiertas, era hora de calcular los daños. Si las pérdidas de la industria química serán millonarias -se conocerán con exactitud cuando las empresas retiren el lodo y el agua, y puedan verse sus efectos -, en la agricultura el temporal también ha causado serios daños. Sobre todo a la avellana, ya que, según Unió de Pagesos, se ha perdido el 70% de la cosecha. El vino de la Terra Alta, que tiene la red de caminos impracticable y los viñedos inundados, corre también riesgo de perderse o de que los racimos se pudran antes de ser recogidos.
Por otra parte, los aproximadamente 2.000 habitantes de El Morell (Tarragonès) vivieron el miércoles una situación de riesgo tras quedar totalmente incomunicados por carretera durante cuatro horas. Este pueblo se encuentra apenas a 500 metros en línea recta del polígono petroquímico Norte, por lo que está incluido en el Plan de Seguridad Exterior de la Química de Tarragona (Plaseqta), que aquel día no se hubiese podido activar en El Morell en caso de ser necesario, ya que únicamente se hubiera podido salir del pueblo en helicóptero.
Aunque la Dirección de Emergencias no activo el plan aquel día, sí lo hizo el jueves en fase de alerta y ante la eventualidad de nuevas lluvias. Fuentes de la industria química señalan que, cuando tenía sentido activar el Plaseqta era el miércoles, que fue cuando más llovió, y no el jueves, cuando únicamente causó "alarma".
La Generalitat desactivó la alerta ayer por la mañana. El Ayuntamiento de El Morell instó a la Administración a solventar la situación para evitar las inundaciones y acusó a la ACA de no mantener limpias las rieras del municipio.
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