Microcréditos, la solución posible

En una charla sobre asistencia en grandes catástrofes, un ponente expuso de forma clara cómo muchas de las ayudas que se mandan en el momento crítico son inútiles desde el punto de vista logístico, otra parte sólo llega parcialmente a los verdaderos damnificados y, cuando dejan de ser noticia de primera plana, a los pocos días, ya los olvidamos para siempre, siendo en este momento cuando más nos necesitan para lograr reconstruir sus medios de supervivencia.

En un documental sobre microcréditos se podía apreciar cómo con pequeñas ayudas dadas con este sistema solucionaban la economía de una familia. Son ayudas solicitadas desde el epicentro de la necesidad, de la pobreza. No son ayudas "impuestas", con visión y criterios occidentales, sino que nacen para solucionar demandas a escala doméstica, de una unidad familiar, que obtenidas llegan a mejorar la economía desde la base misma.

No se regala el dinero, se les aporta de forma que se dignifica su necesidad.

En mi familia, desde hace años, en Navidad se crea un fondo con aportaciones voluntarias y se entregan a una ONG. Este año propuse darlo a una que tramitara microcréditos, pero, tras meterme en la Red, no logré encontrar de forma fiable ninguna entidad.

Ahora planteo mi requerimiento. Les solicito, si pueden, que realicen un trabajo de investigación sobre ONG o entidades fiables que tramiten microcréditos. Dando a conocer estas entidades, laicas o religiosas, los cooperantes, además de aportar nuestro dinero, podríamos poner en marcha una ofensiva de "pásalo" y extenderlo por la Red.