Los sindicatos achacan a las subcontratas más del 50% de los accidentes laborales mortales

Los sindicatos mayoritarios no tienen duda de que más del 50% de los accidentes laborales mortales que se registran en Euskadi tienen relación directa con la subcontratación y uno de sus componentes, la temporalidad en el empleo. Aunque existen discrepancias entre las centrales sobre el número exacto de fallecidos, dada la dificultad de contabilizar los accidentes in itinere (en el trayecto a o desde el puesto de trabajo), los sindicatos sitúan la cifra este año en 30 muertos hasta el día de ayer -35 con los in itinere hasta junio-. Osalan sólo ofrece los datos del primer semestre: 24 muertos, de los que cinco estaban subcontratados, si bien matiza que "tres de ellos murieron de infarto".

En las últimas tres semanas han fallecido cuatro trabajadores en accidentes laborales en Euskadi. La muerte por aplastamiento el pasado 30 de julio de una operaria que inspeccionaba una carga en el puerto de Santurtzi ha sido el detonante de las últimas protestas sindicales. La fallecida llevaba cuatro meses trabajando con contratos de dos días.

Entre julio y lo que va de agosto, han fallecido en Euskadi 11 trabajadores en accidente, mientras que en el semestre anterior la cifra se elevaba a 24 (19 en su puesto y cinco in itinere). En el dato de los dos últimos meses no están incluidos los fallecidos in itinere, cifra que se conoce con un mes de retraso, ya que al tratarse en su mayoría de accidentes de tráfico llevan otro recorrido administrativo. Los sindicatos no tienen ninguna duda de que la temporalidad y la inestabilidad que esa situación genera, unida a la falta de formación y especialización de algunos trabajadores de las subcontratas, representan un peligro real para la vida de los empleados.

Las centrales sostienen que autónomos y trabajadores de empresas subcontratadas representan este año más de la mitad de los fallecidos en accidente. Si a ello se suman quienes tienen un contrato temporal en las empresas matrices -el 33% de todo el empleo-, se supera con creces el 70% de quienes sufren los accidentes mortales.

Para los responsables del Gobierno en la materia la situación presenta una lectura diferente. Osalan ofrece actualmente datos sólo hasta el pasado 30 de junio y resalta que, de los 24 fallecidos hasta esa fecha, cinco estaban subcontratados, pero en tres casos la causa de su muerte fue un infarto. Osalan sólo tiene en cuenta en este caso a los muertos en su centro de trabajo. "Necesariamente hay que hacer una lectura diferente", apuntan fuentes del Instituto de Seguridad y Salud Laboral.

La patronal Confebask cree que la situación es grave, pero sostiene que la siniestralidad baja porcentualmente, aunque en términos absolutos crezca (hay muchos más trabajadores que nunca). Si las cifras de mortalidad laboral descendieron año tras año hasta 2004 en el periodo enero-julio, en 2005 se dispararon: 42 frente a 26 el año predente. Este año han sido 28 hasta julio, sin contar en ningún caso los fallecidos in itinere.

La responsable de acción sindical de UGT, Pilar Collantes, cree que ya es hora de que la fiscalía tome cartas en la materia. Collantes recuerda que en Madrid, por ejemplo, la fiscalía ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento para que la Policía Municipal investigue los accidentes con muertos o heridos muy graves. "En el País Vasco tenemos el problema de que el Departamento de Empleo no habla con los sindicatos que no son ELA, y así no se pueden atajar los problemas", añade.

Para el responsable de salud laboral de CC OO, Kepa González "Osalan es un absoluto desastre". En su opinión, muchas muertes "son perfectamente evitables". Abunda que habría que dar "menos importancia a la estadística y más a quienes arriesgan su vida, los trabajadores".

El pasado día 9, tras morir en Trapagaran un trabajador subcontratado, el responsable de Salud Laboral de LAB, Ibon Zubieta, pidió a la Administración una normativa más severa y que haga que se cumpla.