El Gobierno vasco ratifica la sanción contra Astillero

La consejera de Cultura del Gobierno vasco, Miren Azkarate, desestimó ayer el recurso del club cántabro de remo Astillero, y confirmó la sanción de dos años sin bogar en el País Vasco, además de una multa de 6.000 euros para 14 de sus remeros y de 15.000 euros para su entrenador, José Manuel Francisco.

La sanción, de carácter "ejecutivo y eficaz", agota la vía administrativa, cuyo último episodio lo supuso la presentación el pasado 12 de abril, por parte de Astillero, de un recurso de alzada, ahora desestimado, contra esta misma resolución.

A partir de ahora, el club, ausente esta temporada de la Liga ACT, sólo puede garantizarse su presencia en la Bandera de La Concha (San Sebastián, 3 y 10 de septiembre) a través de una invitación, posibilidad que compete al organizador, el Centro de Atracción y Turismo de la capital guipuzcoana. Para ello, Astillero ha enviado una carta al alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, en la que le pide que acceda a invitarles. La entidad cántabra tiene intención de presentar un recurso en la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que le conceda la suspensión cautelar de la sanción administrativa impuesta por el Ejecutivo vasco, una posibilidad que podría asegurar su presencia en La Concha.

Control antidopaje

Los hechos se remontan al 24 de septiembre de 2005, cuando a la conclusión de la Bandera Telefónica de Hondarribia, el Gobierno vasco efectuó un control antidopaje a todos los remeros que habían solicitado autorización para el uso terapéutico de medicamentos. Todos los deportistas, salvo los 14 remeros de Astillero, se sometieron a él. Entre los argumentos del club, se indica que el control era en realidad un interrogatorio y que en el mismo no pudo estar presente su abogado, como era su intención. En el texto emitido ayer, Cultura expone que la confesión es "un medio de prueba admisible en derecho para comprobar la veracidad de los hechos" -idea para la que se apoya en el Código Mundial Antidopaje-, y aclara que "en ningún caso" fue denegada la asistencia de cualquier letrado al control antidopaje "pues nadie se presentó durante la diligencia".