Los sindicatos defienden la actuación de los bomberos en el siniestro de Laredo
La actuación de los bomberos tras la explosión de gas registrada el pasado jueves en un edificio de viviendas en Laredo (Cantabria), en la que murieron cinco personas y otras cuatro resultaron heridas de gravedad, todas ellas residentes en localidades vizcaínas, fue correcta, en opinión de UGT y CC OO. Ambos sindicatos creen "excesivas" las críticas que algunos vecinos del edificio Jai Alai han planteado contra los servicios de emergencia.
Las quejas de los inquilinos se han centrado básicamente en la tardanza de los bomberos en lanzar agua para sofocar las llamas. Las dos centrales negaron ayer que faltase agua en ningún momento, sino que se optó, "como fija el protocolo de actuación, por salvar vidas antes de echar agua para apagar el fuego".
Los protocolos establecidos para el rescate de personas y extinción de incendios fijan que, en primer lugar, se ha de proceder a salvar las personas y sólo después a la "confinación del fuego, siempre y cuando esto sea posible, y finalmente, su extinción", agregaron los sindicatos.
En una rueda de prensa a la que acudió con unos 50 bomberos cántabros que intervinieron en el siniestro, el dirigente ugetista Francisco González subrayó la importancia que tuvo el haber podido contar con un camión autoescala, que permitió el rescate de ocho personas, y no de 20 como se dijo el día del suceso.
Los sindicatos señalaron también las dificultades que se les plantean a los profesionales para acceder a las fachadas de los edificios. En el caso del Jai Alai, los cierres perimetrales de las fincas se hallan a más de 15 metros de las fachadas. "No se tiene en cuenta el criterio de los bomberos a la hora de construir edificios", precisó González.
CCOO elogió en un comunicado la entrega de quienes "se juegan la vida con su profesión para aliviar el sufrimiento de los demás". La actuación de los bomberos resultó, a su juicio, "impecable, demostrando su profesionalidad y buen hacer con los medios disponibles".
Evolución de los heridos
Los cuatro miembros de la familia de Getxo herida en la explosión de la localidad cántabra
evolucionan favorablemente, aunque su pronóstico sigue siendo grave, según el parte médico difundido ayer por el Hospital de Cruces, donde permanecen ingresados desde el pasado jueves.
Los dos niños de cuatro y ocho años son los que han registrado una leve mejoríaa, ya que el viernes su situación clínica era de "severa gravedad". El estado de su madre, de 40 años, por el contrario, ha empeorado y es de "cierta inestabilidad" con un pronóstico grave.
Los servicios médicos del hospital baracladés realizaron ayer varios injertos al padre, que presenta quemaduras en el 50% de su cuerpo, y al niño, con quemaduras de segundo y tercer grado en el 45% de su cuerpo.
