De la Vega: "El futuro de África es el futuro de España y de Europa"

El pasado día 19 de mayo, el Consejo de Ministros dio el visto bueno a un documento de apenas 13 páginas en las que, con trazos gruesos, se avanzaba un proyecto denominado Plan África. Entonces, como ahora, los inmigrantes llegados a Canarias cada semana se contaban por centenares. Ayer, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, presentó su contenido íntegro, con las líneas maestras y detalles de cada una de las prioridades: 159 páginas con planes para el periodo 2006-2008. "El futuro de África es el futuro de España y de Europa", argumentó en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.

Los países de interés prioritario son Guinea Ecuatorial, Senegal, Malí, Nigeria, Angola, Namibia, Suráfrica, Mozambique, Kenia, Etiopía y Mauritania. Y el objetivo es frenar la inmigración irregular que llega a las costas españolas, con medidas que inciden en el apoyo a los países de origen para potenciar su desarrollo democrático, económico, social y cultural; reforzar el control de las fronteras españolas, ampliar los acuerdos de repatriación con los países de origen y avanzar en la integración de los que llegan. Para ello, la vicepresidenta anunció que la ayuda al desarrollo se situará en el 0,5% del producto interior bruto en esos dos años.

En el plan se da especial importancia a la presencia política y diplomática de España en África, con la creación de embajadas en Malí, Cabo Verde y Sudán, que se suman a las 17 ya existentes en la zona subsahariana.

Tras señalar que en España viven unas 750.000 personas de origen africano, De la Vega hizo hincapié en que uno de los empeños del Ejecutivo es que los inmigrantes "vengan", pero "de forma legal y ordenada y que tengan aquí todos los derechos".

Postración endémica

Con una marcada intención de "situar la región subsahariana en un lugar prioritario de la agenda política" española para "sacarla del estado de postración endémico", que calificó como "evitable", la vicepresidenta hizo un llamamiento transfronterizo: "Es imposible seguir siendo insensible a esta realidad. Los Estados y los Gobiernos europeos deben tomar, debemos tomar, de una vez por todas, clara conciencia de que el futuro de África es también el futuro de Europa y de España, y la estabilidad y el desarrollo de nuestros Estados desarrollados están íntimamente ligados a la estabilidad y al progreso de los países menos avanzados".

Así, apeló al compromiso de "todos": "Ningún Estado puede afrontar los problemas globales en solitario, y ningún Estado puede hoy vivir alejado de la realidad del resto", y "África no puede permitirse el lujo de que 70.000 personas cualificadas abandonen cada año el continente".

De la Vega estuvo acompañada por la ministra de Sanidad, Elena Salgado; el secretario de Estado de Exteriores, Bernardino León; y el secretario ejecutivo de la Comunidad Económica de Estados del África Occidental, Mohamed Ibn Chambas.