El PP vetó una declaración similar en el Congreso

El PP vetó la semana pasada en el Congreso una iniciativa muy similar a la del Parlamento Europeo. IU-ICV había promovido el jueves 29 de junio, última sesión antes de las vacaciones de verano, una declaración institucional de condena del franquismo que no prosperó.

Era la última reunión antes del 18 de julio, día en que se cumplen 70 años del alzamiento fascista, y este grupo pretendía simplemente apoyar en España lo mismo que acordó el 17 de marzo el Consejo de Europa: declaración de esa jornada como día internacional de condena al franquismo y petición al Gobierno español para que erija monumentos en memoria a las víctimas del franquismo e instale una exposición permanente en el Valle de los Caídos para recordar que lo construyeron presos republicanos.

IU-ICV buscó y encontró el apoyo de todos los grupos, menos el PP. En el Congreso, para realizar una declaración institucional, es imprescindible la unanimidad, de forma que la iniciativa no pudo salir adelante por el veto del principal partido de la oposición.

Desde que comenzó la legislatura, los grupos de ERC e IU-ICV, especialmente, han presentado múltiples iniciativas de condena al franquismo o rehabilitación de las víctimas, entre ellas destacados políticos como el asesinado presidente de la Generalitat, Lluís Companys, asesinado en el castillo de Montjuïc, en Barcelona. El PP se ha negado sistemáticamente a apoyarlas.

Reconciliación

La tesis del PP es doble. Por una parte, este partido no se siente heredero del franquismo y sostiene que su historia "comienza en 1978", con la Constitución. Por eso exige que se reivindique el espíritu de reconciliación de la transición y no se hurgue más en el pasado. Por otro lado, el PP insiste en que en 2002, cuando gobernaba, ya se aprobó una declaración unánime de condena al franquismo.

Los negociadores de esa iniciativa, entre ellos el diputado del PP Manuel Atencia, sostienen que pactaron con el socialista Alfonso Guerra que nunca más se trataría este asunto en el Congreso. De hecho, las distintas iniciativas tratadas en estos meses no han llegado nunca como propuesta del PSOE.

Las asociaciones de represaliados del franquismo y exiliados afirman que, a pesar de esa declaración de 2002, las situaciones que denuncian apenas habían cambiado con el PP, y ahora empiezan a hacerlo con el PSOE.

Las reaperturas de fosas comunes, insisten, se seguían haciendo a iniciativa de las familias, sin apoyo oficial. Miles de antifranquistas, especialmente los maquis, aún no cobran pensiones compensatorias. Y España sigue llena de símbolos franquistas, en pueblos y ciudades gobernadas por la derecha y en casi todas las iglesias. Las asociaciones reclaman además que se reconvierta el Valle de los Caídos en un centro de interpretación del franquismo.