Hábitat de luz

Una colonia de unos cien murciélagos de la familia de los vespertiliónidos ha elegido como lugar para habitar un modelo muy concreto de farola instalada en la pedanía ilicitana de Valverde, en Elche. Es el único caso conocido en la zona, según el naturalista local Jesús Hernández, que ha hecho varios trabajos de investigación sobre la fauna ibérica. Hernández explicó que este descubrimiento es muy interesante y "nos dice que en la zona no hay muchos recursos naturales para esta especie, ya que siempre los preferirían a un elemento artificial para vivir". Esta situación es una muestra más de cómo los animales tienen que ir adaptándose a un nuevo entorno alterado por el hombre y cómo especies tan sensibles son capaces de encontrar lugares adecuados a sus necesidades.

La especie ha agudizado su instinto para adaptarse a la variación de su entorno físico

En la Comunidad Valenciana existen hasta 22 variedades de murciélagos. Necesitan para vivir un entorno muy estable en cuanto a temperatura y humedad, especialmente en los refugios que usan para dormir, por el día, y en los lugares donde crían. Por eso es frecuente descubrirlos en cuevas, cavidades naturales y otros escondrijos donde se encuentran seguros y sin estímulos que les perturben. En esta ocasión, unos trabajadores del servicio de alumbrado público descubrieron un número importante de murciélagos en unas luminarias en Valverde. Sorprendidos lo comunicaron a este naturalista que hizo un trabajo de observación e investigación que revela que hay una colonia de hasta cien ejemplares adultos de quirópteros que han decidido vivir en el modelo de farola Onix de 8 metros de altura. "Es curioso" manifestó Hernández, "que no utilicen el mismo modelo de farola pero más alto, ni este modelo en otros lugares". Los murciélagos dormitan de día dentro del poste y por la noche, cuando la farola se enciende, salen a cazar, principalmente insectos voladores, de los que se alimentan.

Hubo un proyecto hace unos años para acondicionar los restos de fortificaciones de la Guerra Civil que existen en el paraje natural del Clot de Galvany y convertirlos en refugios para murciélagos. Sin embargo, no se logró que los animales acudieran a estos lugares, lo que demuestra que no es tan fácil conseguir un lugar adecuado para ellos. De momento las farolas de esta urbanización lo han conseguido y no existe ningún perjuicio ni para el alumbrado público ni para el animal, ya que no se han hallado ejemplares electrocutados. O sea, han hallado el hábitat ideal.

Los murciélagos de la Comunidad Valenciana están protegidos y existen varios programas de conservación financiados por fondos europeos, encaminados a profundizar en el conocimiento de la especie, proteger sus refugios naturales y educar a la población para su conservación.