Sanidad estima en 200 millones de euros el coste de la atención a los desplazados pero ingresa 7,8

La Consejería de Sanidad estima en torno a 200 millones de euros el coste extraordinario que asumió en 2005 por atender a los turistas nacionales y extranjeros que visitaron la Comunidad Valenciana y requirieron algún tipo de atención sanitaria, desde recetas hasta atención hospitalaria. Los "desplazados" nacionales generaron un gasto de 120 millones de euros, según Sanidad, que recibió del denominado Fondo de Cohesión una compensación de 3,8 millones por ese concepto. Los desplazados extranjeros generaron un gasto de 80 millones, Sanidad logró facturar 26 millones e ingresó cuatro.

La posibilidad de intercambiar facturas entre gobiernos autónomos en razón de los costes asumidos por atender a los desplazados fue desestimada en su día por razones políticas. Hoy ha llegado a convertirse en un imposible por cuestiones meramente técnicas, porque los sistemas de contabilidad y facturación que ha desarrollado cada gobierno autonómico es indepediente y específico, de modo que es imposible cruzar datos homogéneos.

El Fondo de Cohesión Sanidataria creado en 2002 pretende paliar el problema, pero la distancia entre las estimaciones de gasto asumido por la Consejería de Sanidad (120 millones de euros) por atender a turistas nacionales y la compensación recibida, 3,8 millones de euros, revela la inconsistencia del procedimiento.

Técnicos de Sanidad cifran en 35 millones de euros los gastos generados por atención primaria a turistas españoles; elevan a 65 millones de euros el gasto derivado de las recetas emitidas por el Servicio Valenciano de Salud para pacientes de otras autonomías; cifran en 21 millones de euros el gasto por atención hospitalaria de nacionales; y apenas estiman un gasto de cuatro millones de euros por servicios médicos de urgencia.

Otro problema es la posibilidad de facturar los costes derivados de la atención sanitaria a turistas extranjeros a sus países de origen a través del Estado.

La Consejería de Sanidad estima que los turistas extranjeros atendidos en la Comunidad Valenciana generaron una factura de 80 millones de euros. A lo largo de 2005, Sanidad logró facturar 8,8 millones de euros por servicios de atención primaria y farmacia y otros 13,2 por atención hospitalaria de desplazados extranjeros.

Los servicios efectivamente facturados a turistas extranjeros, por un total de 22 millones de euros, apenas representaron la cuarta parte del gasto total estimado para atender a los desplazados foráneos. Pero Sanidad apenas logró ingresar cuatro millones de euros procedentes de sistemas sanitarios públicos o privados en el exterior.

El sistema sanitario valenciano, además, asume un coste regular que la consejería estima en 71,3 millones de euros por atender a extranjeros residentes en territorio valenciano, en su mayoría jubilados de procedencia europea, que disfrutan de la tarjeta sanitaria emitida por la Generalitat. Sanidad sostiene que el Estado ingresa una media de 2.400 euros por cada pensionista europeo asentado en España y reclama su cuota.

Además, Sanidad estima en torno a 37.000 usuarios el número de extranjeros que ni cotizan a la Seguridad Social ni están empadronados y que, sin embargo, disfrutan de tarjeta sanitaria. El coste del servicio de atención a esos usuarios se estima en torno a 32 millones de euros.

La factura conjunta que asume la Generalitat Valenciana por prestar servicios sanitarios a personas que no están incluidas en los censos de "población protegida por el sistema nacional de salud", en la terminología que usa el Ministerio de Sanidad, asciende pues a unos 300 millones de euros anuales.

El presupuesto de la Consejería de Sanidad representa el 40% del presupuesto total de la Generalitat, sin embargo, la financiación sanitaria per cápita de los valencianos es la más baja de España. El presupuesto de Sanidad ha crecido desde 2003 en porcentajes superiores a los dos dígitos. Un 14% entre 2003 y 2004; un 12% entre 2004 y 2005; y un 11% entre 2005 y 2006. El crecimiento acumulado entre 2003 y 2006 arroja un porcentaje superior al 41%. Sin embargo, los fondos públicos para atención sanitaria en la Comunidad Valenciana se mantienen en torno al 9% del total del Estado en el mismo plazo cuando la población que requiere esos servicios está por encima del 11,4% del total nacional. Porque la financiación sanitaria per cápita en la Comunidad Valenciana es la más baja de España.