El PSE-EE predice que el Gobierno no estará preparado para cumplir la ley de Dependencia en enero

La parlamentaria socialista Gemma Zabaleta advirtió ayer al Gobierno de que, con su oposición a la ley de Dependencia que tramita el Congreso de los Diputados, corre el riesgo de no estar en condiciones de cumplir su mandato cuando entre en vigor en enero del próximo año. El ejecutivo vasco no estará, afirmó, "en condiciones de atender a los 50.000 vascos" que adquirirán derechos de obligado cumplimiento por las administraciones con la aprobación de esa ley, que enmendaron a la totalidad tanto el PNV como EA.

Zabaleta lamentó sobre todo la posición del principal partido del ejecutivo autonómico, al que acusó de poner zancadillas a la ley por un lado, pero por otro "poner el cazo", en referencia al acuerdo firmado por el consejero de Asuntos Sociales, Javier Madrazo, con el ministro Jesús Caldera, para recibir nueve millones de euros. "Eso no les parece mal ni atenta contra las competencias", ironizó, al tiempo que preguntaba a la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, cómo va a gestionar ese acuerdo con soporte económico y cómo lo va a coordinar con las administraciones foral y local.

El debate reprodujo en parte el que la semana pasada mantuvieron el lehendakari, Juan José Ibarretxe, y el portavoz socialista, José Antonio Pastor. Ibarretxe se mostró convencido de que habrá acuerdo y Pastor negó que el proyecto de ley del Gobierno central invada competencias, porque en su artículo dos menciona las competencias exclusivas de las comunidades autónomas y el derecho de éstas a disponer su propio catálogo de servicios. Lo que preocupa al PNV, sostienen los socialistas, es que, con la nueva ley, lo que hoy son subvenciones "graciables" se conviertan en derecho exigible y universal, de pago obligado.

Contradicción

Ayer Zabaleta puso de manifiesto la contradicción entre la reivindicación de esa competencia exclusiva y el hecho de no haber legislado sobre ella en 25 años de autogobierno. "¿Por qué no tenemos aún nuestra propia ley?", interrogó, para concluir que el ejecutivo autonómico "no tiene ni idea de cómo afrontar esta cuestión". La diputada pidió a Zenarruzabeitia que explicara las repercusiones sobre las distintas administraciones y de qué forma va a complementar el Gobierno en Euskadi el contenido de la ley que salga del Congreso.

Zenarruzabeitia reconoció que el "hueso de roer" es la financiación, en la que acusó al Gobierno central de endosar a las comunidades autónomas el gasto. Si la ley no se adecúa al Concierto Económico durante el debate en Madrid, "el Estado nos tendrá enfrente", anunció.

La vicelehendakari no dio razones para la inexistencia de una ley vasca, atribuyó la mala situación de la que había hablado Zabaleta a "la complejidad del sistema" institucional vasco y acusó al PSE de haber "desbaratado lo poco de bien que se estaba haciendo" con actuaciones "irracionales".