"Nadie puede quitar a las nobles el derecho a la igualdad"

Isabel Hoyos, que litiga con sus hermanos por el título de duquesa de Almodóvar del Río y llevó su caso hasta la ONU, sin éxito, está ilusionada con la tramitación de la ley que acabará con el principio de varonía en la sucesión nobiliaria, pero preocupada por las dudas expresadas en un informe de la letrada de la Comisión de Justicia sobre la retroactividad, ya que su caso podría quedar fuera de la reforma.

Pregunta. ¿Qué le parecería que esta ley se aplicara sólo para sucesiones futuras?

Respuesta. En principio, creíamos que la ley incluiría a todos los títulos desde 1978, cuando se aprobó la Constitución y el artículo 14, el de la igualdad ante la ley. Pero parece que la cosa juzgada da muchos problemas, y nos conformamos con que incluyan a los títulos aún en litigio. No me creo que vayan a dejar fuera de esta reforma a quienes hemos luchado desde 1997 en todas partes, en España y fuera. Somos pocas, unas ocho mujeres sin medios, que nos enfrentamos a la gente más poderosa de la nobleza, con los mejores abogados. No sería justo. Incluso hay una enmienda que propone que sólo sirva para los que aún no han nacido, o sea que se aplicaría dentro de 80 años, es absurdo.

P. ¿Por qué ha costado tanto?

R. Antes de 1997, los jueces venían aplicando el artículo 14, y las mujeres primogénitas lograban los títulos que merecían. Pero ese año, una sentencia del Tribunal Constitucional nos hundió. A Pilar de la Cierva, la mujer que sufrió esa discriminación odiosa, le hicieron pagar ocho millones de pesetas en costas. Hay mucho machismo, también entre los jueces. La gente se piensa que por tener un título somos ricos, pero hay muchísima nobleza antigua que con los años lo ha perdido todo, gente de clase media.

P. ¿Por qué la mayoría de los nobles están a favor del principio de varonía?

R. Lo que no puede ser es que en siglo XXI se acepte como válido un principio medieval, del siglo XIII, que señala que somos inferiores al hombre, de peor sangre y condición. No queremos privilegios, sólo poder recordar el honor que le dieron a nuestros antepasados. Es una causa justa, nadie nos puede quitar a las nobles el derecho a la igualdad con los hombres. He tenido el apoyo de siempre de las mujeres progresistas. Tienen que acabar ya con esta injusticia e incluirnos a todas.