Siete horas para pedir una disculpa

Durante más de siete horas compareció Fidel Castro el miércoles por la noche en un programa de la televisión cubana para atacar a la revista Forbes, a la que reclamó "disculpas públicas" por haberle incluido en la lista de los 10 jefes de Estado más ricos del mundo. "Estamos esperando la respuesta de los mentirosos, de los calumniadores, pero han pasado semanas y no han dicho una palabra. Se han metido en un callejón sin salida", declaró el mandatario, en referencia al artículo de Forbes que le atribuyó una fortuna personal de 900 millones de dólares. Castro entró en polémica con la revista norteamericana la semana pasada, cuando retó a la publicación y ofreció renunciar a sus cargos si podía demostrar que él disponía de un solo dólar en algún banco extranjero. El gobernante ha convertido la desautorización de Forbes en un asunto de Estado, en el que se han implicado sus más cercanos colaboradores. Ayer, junto a él en televisión, el ministro de Cultura, Abel Prieto, y el canciller Felipe Pérez Roque, entre otros, denunciaron una conspiración entre Washington, la CIA y "el libelo norteamericano" para desprestigiar a la revolución cubana. "Tenemos que obligarlos a que le den una excusa a la opinión pública internacional", dijo el líder comunista, tras acusar al Gobierno de Estados Unidos de "usar la difamación, la calumnia y la mentira" como "una de las peores armas contra todo lo que sea progresista en el mundo, contra todo lo que sea justo".-