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Sanidad pagará el traslado de enfermos en taxi a hospitales

El Gobierno regional promete reducir la espera a 10 minutos

Oriol Güell

Los pacientes que deban ir al hospital y que requieran ayuda pero no necesiten un vehículo con equipos médicos empezarán a utilizar a partir de hoy taxis pagados por la Consejería de Sanidad. Pero no será el enfermo quien decida el medio de transporte: él llamará a Sanidad y ésta enviará, según los recursos disponibles, un taxi o una ambulancia. La medida pretende mitigar los retrasos en el transporte sanitario.

La presidenta regional, Esperanza Aguirre, firmó ayer el convenio con cuatro grandes asociaciones del taxi -Tele-Taxi de Madrid, Alcalá Radio-Taxi SCL, Asociación Gremial de Auto-Taxi de Madrid y Radio Taxi de Madrid Sociedad Cooperativa Madrileña- para el traslado de enfermos. El coste previsto para la Consejería de Sanidad superará los 1,4 millones de euros anuales.

En su intervención, Aguirre explicó que este sistema se concibe como "un transporte complementario" al que prestan las ambulancias, lo que permitirá liberar los vehículos de transporte sanitario -los que cuentan con equipación médica, como de respiración mecánica u otros- y garantizar "un menor tiempo de espera" a aquellos que sí necesitan este tipo de vehículos.

El servicio se aplicará en toda la Comunidad de Madrid y será el Centro de Coordinación del SUMMA 112 el que se encargará de organizar el servicio: realizar los trámites administrativos, decidir si el traslado lo realiza una ambulancia o un taxi, comunicarse con el enfermo, el paciente y el hospital, y, por último, pagar la factura al taxista. Además, para evitar que los enfermos aguarden en la calle la llegada del taxi, se avisará a los usuarios de la llegada del vehículo.

"Todos los días se salvan vidas gracias al transporte sanitario de la Comunidad de Madrid, pero para liberar esos transportes urgentes es importante la colaboración de los taxistas que hoy estamos consiguiendo", añadió Aguirre.

Los pacientes que se beneficiarán del traslado en taxi son aquellos que necesiten acudir al hospital o hacer el viaje de regreso a casa, pero que mantengan la autonomía personal necesaria para moverse sin ayuda. Entre ellos están algunos de los que se someten a diálisis tres veces por semana, los que realizan un tratamiento de rehabilitación o radioterapia o quienes ya han recibido el alta, entre otros.

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Este convenio, sin embargo, recibió las críticas de UGT. En un comunicado, el sindicato calificó de "inadecuado" el uso de taxis y señaló que éstos no pueden usarse como transporte sanitario porque "no reúnen las características técnico-sanitarias reguladas en la normativa estatal y autonómica".

La ley, sigue UGT, sólo contempla el uso de taxis en casos de asistencia sanitaria urgente, inmediata y de carácter vital y cuando no puedan utilizarse oportunamente los servicios del Sistema Nacional de Salud.

También arremetió contra el convenio la Agrupación General de Taxistas de Madrid (Agetaxi), que criticó que las cuatro empresas firmantes sólo cubren Madrid capital y Alcalá de Henares, con lo que se margina, según Agetaxi, a un millón de habitantes de la periferia. Un portavoz de Sanidad aseguró que los taxis cubrirán todo el territorio regional.

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Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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