_
_
_
_
Estafa en la inversión filatélica

Greenpeace denunció los nexos de Fórum con un traficante de armas y con Liberia

Los ecologistas criticaron en 2001 los negocios madereros de la filatélica con un supuesto delincuente

Greenpeace denunció en un informe de 2001 los negocios y vínculos de Fórum África, filial de Fórum Filatélico, con el considerado por la ONU mayor traficante de armas en África, Leonid Minin, nacido en Ucrania. La empresa filatélica española, ahora intervenida por un juez debido a una supuesta estafa masiva, acordó pagar cinco millones de dólares al traficante de armas por concesiones forestales en Liberia que otorgaba Minin bajo el amparo del entonces presidente, Charles Taylor, y cuyos ingresos, según Greenpeace, le servían para su negocio de venta de armas a los señores de la guerra que asolaban la vecina Sierra Leona.

Más información
El ex ministro de Portugal Martins da Cruz deja su cargo en Afinsa
Solbes asegura que el PP no avisó de la investigación
LA OCU SE PERSONARÁ EN LA QUERELLA
Afinsa recurre el ingreso en prisión de cinco de sus directivos
Los jueces piden una oficina especial para los miles de afectados
Justicia apoya la oficina de ayuda a las víctimas de la estafa filatélica propuesta por la Audiencia

Cuando fue detenido Leonid Minin en Italia en 2001, la policía descubrió sus conexiones con empresarios españoles. Entre la documentación que se le intervino figuraba un contrato con fecha 24 de diciembre de 1999 titulado "Contrato de compraventa para algunos bienes, equipamiento y maquinaria", suscrito por el socio español de Fórum Liberia, una sociedad creada para operar en su territorio por Fórum África, filial de Fórum Filatélico.

Dicha firma, según la asociación ecologista Greenpeace, "entregó en noviembre de 1999 a Minin un talón bancario por millón y medio de dólares de la Unión de Bancos Suizos, como primer pago de un contrato de cinco millones de dólares suscrito con Exotic Tropical por las concesiones madereras y la compra de madera". El máximo dirigente de Fórum, ya fallecido, reconoció en 2001 sus contactos con Minin: "Le compramos los activos de una sociedad a través de Fórum Liberia. Sólo le entregamos un pagaré de un millón y medio de dólares avalado por mí".

El Servicio de Prevención para el Blanqueo de Capitales detectó en 2001 un pago de cinco millones de dólares de Fórum África al traficante de armas. Directivos de Fórum explicaron que habían cerrado el negocio con Minin engañados por un intermediario.

Los nexos entre Fórum y el traficante de armas Minin no se ciñeron a la madera. Otro socio de Fórum Liberia, dueño de una empresa de seguridad alicantina, según Greenpeace, con ayuda de un ex comisario de policía español, instaló el sistema de seguridad del presidente Charles Taylor. La ONU, en un informe de 2000, ya alertó de tales vínculos: "Minin está vinculado a la industria maderera, que suministra un amplia inyección a la tesorería oculta del presidente Taylor para fines no esclarecidos. Tres compañías están implicadas: Exotic and Tropical Timber Enterprise, Fórum Liberia y Oriental Timber Company".

¿Cómo surgió este informe de Greenpeace? Miguel Ángel Soto, miembro de la asociación ecologista y autor del informe, recuerda así las circunstancias: "Lo primero fue constatar que en Liberia había capital español y que organizaciones no gubernamentales liberianas en pleno conflicto estaban alertando sobre la situación de violencia y guerra abierta. Cuando la ONU, en un informe, reconoce que el sector forestal y el capital privado están jugando un sucio papel en el conflicto liberanio su denuncia cobra más fuerza. Y cuando aparecen empresas españolas conocidas como Fórum, vemos que no hay ningún escrúpulo de inversión. El capital, como hemos visto estos días [alude a la presunta macroestafa en que se halla inserta Fórum], se mueve por unos oscuros intereses de enriquecimiento personal". "Tiramos del hilo", añade, "y descubrimos que el negocio forestal estaba sirviendo para financiar a Taylor. Cuando vimos que contactaban un directivo de Fórum y el mayor traficante de armas de África vimos la luz". "No presentamos denuncia", concluye, "por que no supimos en qué tipo de delito se podría insertar. ¿Cuál es el delito? Y solemos encontrarnos que cuando el delito se produce fuera de nuestras fronteras, el código no recoge lo que pretendemos denunciar. En aquel momento, si no le pasó nada al directivo de Fórum implicado, es porque no había forma".

Minin sólo pasó un año en prisión. Pese a que se acreditó que había violado el embargo de armas decretado por la ONU y enviado 68 toneladas de armas con destino a la facción más sanguinaria de Sierra Leona desde Ucrania, el tribunal entendió que no amenazó la seguridad interna italiana. El ex presidente de Liberia, Charles Taylor se encuentra preso en Sierra Leona, a disposición del Tribunal Especial de Naciones Unidas, desde marzo de este año. Se le acusa de crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra y violaciones de los derechos humanos al ser el impulsor y principal beneficiario de la guerra de Sierra Leona (1991-2001), una de las más cruentas del continente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_