Los grupos eólicos de Cataluña crean un 'lobby' para impulsar el sector

Impulsar la energía eólica en Cataluña y controlar que los parques que se construyan en la comunidad se hagan correctamente es la misión con la que nace la Asociación Eólica de Cataluña (Eoliccat), un lobby que acaban de crear 45 empresas, prácticamente la totalidad de las firmas del sector eólico que operan en esta comunidad autónoma.

En los próximos años se prevé una importante expansión del sector en Cataluña y "es muy importante la cohesión entre todos los actores que intervenimos y también que proyectemos una sola voz", explica el presidente de Eoliccat, Ramon Carbonell, consejero delegado de Copcisa, una de las empresas que integran la asociación.

El Plan de Energía de Cataluña 2006-2015, aprobado en octubre pasado por el Gobierno tripartito, proyecta una Cataluña con 3.500 megavatios de potencia eólica instalada en el año 2015. La empresa no es menor, teniendo en cuenta que hoy la comunidad cuenta con 145 megavatios, recuerda Carbonell.

"Las cosas se pueden hacer mejor y peor. A excepción del parque de la Anoia, inaugurado recientemente, el resto de las instalaciones son antiguas y nosotros conocemos bien el sector", explica el presidente de Eoliccat. El espejo en que se mira son los parques eólicos de La Rioja y Navarra, "todo un ejemplo de integración con el medio ambiente", subraya Carbonell.

Décimo puesto

España es el segundo país del mundo con más potencia instalada. Cataluña ocupa sólo el décimo puesto dentro del Estado, muy por debajo de comunidades como las dos anteriores, Galicia, las dos Castillas, Andalucía y Aragón. La primera es Galicia, con 2.369 megavatios.

La capacidad instalada de Cataluña se genera hoy en ocho parques eólicos operativos levantados en el Baix Ebre, el Baix Camp, la Anoia y el Alt Empordà. Hay otros 34 con autorización administrativa concedida, con una potencia instalada de 1.139 megavatios, y 39 más, con una potencia de 1.351 megavatios, cuya tramitación ha sido ya publicada en el Diaro Oficial de la Generalitat.

En este sentido, el nuevo consejero de Trabajo e Industria de la Generalitat, Jordi Valls, ha pedido, en el marco del Energy Congress, que "las fuerzas medioambientalistas, que han conseguido que se apruebe el plan de energía, apuesten por las energías renovables".

Valls reconoce que la energía eólica y la solar tienen un impacto visual y paisajístico, pero considera que se trata de una "cuestión de coherencia". El consejero ha defendido que la conexión eléctrica entre Cataluña y la vecina Francia, que considera necesaria el plan de la energía autonómico pero cuyo trazado definitivo está en el aire, hará posible una mayor proliferación de las energías renovables.