Azkarate critica la condena a un joven por negarse a declarar con traducción

La portavoz del Gobierno vasco y consejera de Cultura, Miren Azkarate, consideró ayer "difícil de entender" la sentencia condenatoria por un delito de desobediencia impuesta por un juez de la capital vizcaína contra una persona que se negó a declarar en un juicio en euskera con la presencia de un traductor.

El colectivo en favor del uso del euskera Euskal Herrian Euskaraz denunció el pasado lunes la condena de seis meses dictada contra esa persona, que pretendía declarar como testigo en euskera, una de las dos lenguas cooficiales en Euskadi, sin traductor. Azkarate indicó que, "si aceptamos, como se nos dice, que el marco jurídico político está definido por la Constitución y el Estatuto", ese marco reconoce el castellano y el euskera como lenguas oficiales.

La portavoz añadió que en el ordenamiento legal se establece el derecho de los ciudadanos a comunicarse en ambas lenguas y que nadie podrá ser "discriminado en función de la lengua". Por ello, agregó, "difícilmente se entiende que la Justicia no atienda" a los que la propia Constitución establece sobre este asunto. Azkarate, sin embargo, soslayó varias resoluciones del Constitucional en la que se considera constitucional el uso de los traductores en los juicios en las comunidades con lenguas cooficiales cuando alguna de las partes no la conoce.