_
_
_
_

Comienza el juicio contra la médica que acuchilló a 10 personas

La doctora Noelia de Mingo, que padece esquizofrenia, rechaza declarar ante los jueces

"Con su permiso, señoría, pero no deseo contestar a ninguna pregunta". La doctora Noelia de Mingo, que se enfrenta a 65 años de cárcel por acuchillar a 10 personas el 3 de abril de 2003 en el hospital de la Fundación Jiménez Díaz, matando a tres de ellas, rehusó ayer declarar ante el tribunal de la Audiencia de Madrid que la juzga. Sí declararon, en cambio, cinco de los siete acuchillados. El juicio proseguirá hoy.

Más información
Los heridos aseguran que De Mingo apuñaló a sus víctimas con premeditación y a sangre fría
El fiscal pide una pena de 65 años para De Mingo pero sugiere que la cumpla en un "centro cerrado"

Los cinco testigos que declararon ayer describieron el horror que les tocó vivir el día en que Noelia, presa de un brote de su diagnosticada esquizofrenia paranoide, asió un cuchillo y la emprendió a puñaladas con todas las personas con que se topó en el hospital. En su ruta asesina, la doctora Noelia de Mingo mató a dos enfermos que estaban en los pasillos -Jacinta Gómez y Félix Valles Arroyo- y a una colega, la también médico Leilah el Ouaamari, de 27 años. Siete compañeras quedaron malheridas. Eran las 14.20 del día 3 de abril de 2003.

Tras dejar un reguero de sangre por los pasillos de la tercera planta del hospital, un celador del centro, provisto de una barra de hierro, la acorraló al fondo de un pasillo sin salida y la retó: "O tiras el cuchillo o te reviento la cabeza". Noelia dejó entonces caer al suelo el cuchillo y se entregó. Su irreversible enfermedad mental le había llevado a pensar que sus compañeros la espiaban y que eran actores de un circo en el que ella era el enemigo a batir.

Sus compañeras y víctimas recordaron ayer durante el juicio que Noelia era "poco comunicativa". Días antes de emprender su ruta asesina, algún compañero la vio escribiendo en un ordenador apagado. "Tenía una mirada extraña, como desencajada, riéndose todo el rato, y me daba miedo", recordó María A. V., médica residente y compañera de Noelia. A María le cortó la yugular con un cuchillo.

El juicio se centrará en los informes periciales, donde consta que Noelia padece una esquizofrenia paranoide con ideas delirantes. "Oía voces y creía que sus compañeros eran actores de un circo que iban a por ella", según estos informes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_