La UE amplía el plazo a Serbia para que entregue al general Mladic, acusado de crímenes de guerra
El plazo de un mes dado a finales de marzo para que Serbia entregara al Tribunal Penal Internacional de La Haya a Ratko Mladic se cumplió ayer, sin que el general acusado de ser el principal responsable de la matanza de Srebrenica haya sido puesto a disposición judicial. En un último gesto de condescendencia, Bruselas ha dado hasta el miércoles a Belgrado para cumplir el compromiso adquirido. De no ser así, quedarán en suspenso las negociaciones para un acuerdo de asociación y estabilización con la UE, paso necesario para la integración del país balcánico.
El mes de respiro concedido al primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, para la captura y entrega de Mladic pasó sin novedad. "En este momento, nadie puede decir si Mladic será extraditado ni cuándo lo será", declaraba ayer a la prensa serbia Rasim Ljajic, el ministro encargado de la cooperación con el Tribunal de La Haya. Según él, se ha avanzado en la labor de búsqueda, pero no hay modo de aventurar una detención. De ahí que la prórroga del plazo en tres días no suponga nada.
Belgrado mantiene que la voluntad política de capturarlo es incuestionable y que, en vista de ello, la inevitable suspensión de negociaciones deberá ser de corta duración. Para la Unión, este nuevo incidente con Belgrado llega en el momento menos oportuno. Nadie quiere un enfrentamiento con Serbia a escasas semanas de la celebración de un referéndum para la hipotética separación de Montenegro y en plena discusión sobre el futuro de la provincia de Kosovo.
En un seminario sobre relaciones transatlánticas que se celebra este fin de semana en Bruselas, el ministro serbio de Exteriores, Vuk Draskovic, tuvo que oír cómo el senador John McCain, posible candidato presidencial republicano, y Richard Holbrook, uno de los negociadores de la paz de Dayton, manifestaron que "lo que ha pasado en Kosovo terminará en independencia". Draskovic alertó que esa solución "es muy peligrosa" por sentar precedentes para otras partes del mundo y de la propia región.
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