Vecinos de Ayora-Cofrentes cortan la N-330 en protesta contra la incineradora de Zarra

Cientos de vecinos del Valle de Ayora-Cofrentes se manifestaron ayer en contra de la instalación de una incineradora en la localidad de Zarra. Los manifestantes, unos 3.500, según los organizadores, cortaron por espacio de media hora la N-330. El alcalde de Ayora, el popular Francisco Gómez Pardo, explicó que la Generalitat ya ha dado el visto bueno al polígono industrial donde presumiblemente se ubicará la incineradora. "Nos somos una comarca basura", fue el lema coreado por los vecinos del valle, cuyas autoridades han apostado por el turismo de interior.

Los vecinos ya se movilizaron en 2002 contra la instalación de un vertedero

La Coordinadora contra la Incineradora de Zarra, compuesta por un centenar de organizaciones ciudadanas y partidos políticos, convocó ayer una segunda protesta contra la instalación de una planta incineradora en la comarca. Según el alcalde de Ayora, el popular Francisco Gómez Pardo, en Cofrentes se unieron a la protesta unas 150 personas, en Jalance otras 300, en Jarafuel 300 más, en Teresa de Cofrentes otras 350 y en Ayora unas 2.500 personas. La comarca, con más de 90.000 hectáreas de superficie, cuenta con apenas 10.000 habitantes en total.

Con el lema bajo el brazo de "no somos una comarca basura", los vecinos del valle expresaron su rechazo al proyecto de un complejo industrial medioambiental previsto en Zarra y que incluiría una planta para incinerar residuos.

La Generalitat, a través de la Comisión Territorial de Urbanismo de la Consejería de Territorio, ha dado luz verde a este PAI, en un procedimiento "cuanto menos irregular, que ha llevado al Ayuntamiento de Ayora a presentar el pasado mes de febrero un recurso contencioso-administrativo contra la resolución del departamento de Rafael Blasco", explica la coordinadora.

Esta plataforma denuncia que el polémico complejo industrial está proyectado en un paraje de gran valor natural, sobre una superficie de 80 hectáreas, y que inicialmente promovía la sociedad limitada Asenath. En la actualidad es la mercantil Sedesa Urbana la responsable de sacar el polígono adelante, según los vecinos. Los alcaldes de la zona conocieron de la existencia del proyecto de una planta incineradora precisamente tras entrevistarse con la sociedad promotora. De momento, carecen de nuevos datos sobre su ubicación exacta y capacidad.

"Si queremos relanzar el turismo de interior en la comarca y ser un referente, no podemos permitirnos instalaciones de este tipo. Además, ya tenemos la central nuclear de Cofrentes", explicaba Francisco Gómez.

La coordinadora, que se reúne todos los primeros lunes de cada mes, volverá a hacerlo el 8 de mayo para planificar nuevos actos de protesta u otras acciones.

Esta comarca ya se enfrentó el año 2002 a otro intento, promovido por la Diputación Provincial de Valencia, de instalar en Zarra, una de las pocas localidades del valle gobernadas por el PSPV-PSOE, un vertedero y una planta de basuras con capacidad para el tratamiento de 150.000 toneladas. En aquella ocasión lograron, después de varias protestas, detener la instalación. Ahora se vuelve a recuperar el proyecto.