El Consell reconoce que no tiene resquicios para recurrir el fallo del TS sobre la lengua

El Consell se aferró ayer a la cuestión nominalista para mantener vivo el conflicto lingüístico y anunció que dictará una orden similar a la que acaba de anular la reciente sentencia del Tribunal Supremo (TS), de manera que "no habrá homologación entre valenciano y catalán". El Consell reconoce que quizá no sea posible recurrir ese fallo, que lo que hace es precisamente restar validez a ese criterio nominalista y se apoya en la ciencia para consolidar jurídicamente la unidad de la lengua. Pero el Consell considera que el nuevo Estatut d'Autonomia le abre nuevas posibilidades.

"La sentencia se refiere al anterior Estatut, donde el valenciano estaba en situación de indefensión por lo que respecta a su identidad", dijo ayer el portavoz del Consell, Esteban González Pons, quien anunció la próxima aprobación de una orden similar a la que ha derogado el fallo del alto tribunal. Dijo que el Consell acata esa sentencia, que, admitió, "quizá no sea posible recurrir", y añadió que ese decreto se basará en la nueva redacción del Estatut, en el que se ha introducido la denominación idioma valenciano.

El consejero hizo un rimbombante discurso secesionista, al que el PP no parece querer renunciar por muchas sentencias que vengan: "El valenciano es sagrado. No se juega con el valenciano. Cuando se niega la identidad del valenciano desde el punto de vista político y jurídico, se niega la identidad y la autonomía del pueblo valenciano respecto a otros pueblos españoles. El Consell seguirá luchando por el valenciano, por su identidad, por su autonomía, no se rendirá nunca de su defensa del valenciano".

Un discurso meramente nominalista que eludió un dato relevante: el nuevo Estatut confiere la autoridad normativa sobre el asunto a la AcadèmiaValenciana de la Llengua (AVL) y ésta aprobó el pasado año un dictamen -en cuya negociación participó González Pons- que deja clara la unidad de la lengua, avalada por la comunidad científica y por numerosas sentencias, incluida la del Tribunal Constitucional, que en su día ya dictaminó que el valenciano y el catalán son una misma lengua con dos denominaciones distintas.

El portavoz del Consell, consciente de que un recurso contra este fallo del Supremo sólo se podría sustanciar ante el Constitucional, afirmó que "las sentencias no están por encima de las leyes" y anunció que el Consell tiene "toda la intención de volver a decretar la no homologación" de los títulos de valenciano y catalán. Incluso reveló la estrategia del PP en esta cuestión: dio por hecho que esa orden será recurrida, pero reconoció que pasará mucho tiempo hasta que haya una nueva sentencia en contra y que mientras tanto "el PP mantendrá a salvo el valenciano". Mientras gobierne el PP, "nunca se aceptará", dijo González Pons. "A lo mejor, cuando gobierne el PSPV, serán la misma lengua".