La Generalitat valenciana echa un pulso al Ejecutivo por la visita del Papa

La Generalitat valenciana, que preside el popular Francisco Camps, ha decidido no colaborar con Presidencia del Gobierno para preparar la visita del Papa a Valencia, que tendrá lugar el 8 y el 9 de julio, hasta que se aclaren las competencias que tiene cada Administración en la que será la primera visita de Benedicto XVI a España.

El pasado martes, el consejero de Relaciones Institucionales y portavoz del Ejecutivo valenciano, Esteban González Pons, hizo suspender la reunión que se celebraba entre la Fundación del V Encuentro Mundial de la Familia -que integran la Generalitat, la Diputación, el Ayuntamiento y el Arzobispado de Valencia- y la delegación de Presidencia del Gobierno, encabezada por el secretario general Nicolás Martínez Fresno.

El consejero se presentó cuando la reunión ya estaba iniciada y propuso suspenderla, al considerar que ambas partes tenían criterios distintos y que el Gobierno pretendía capitalizar una visita cuando los trabajos de organización ya están muy avanzados.

Fuentes de Presidencia del Gobierno explicaron que la visita se concertó en Valencia para evitar suspicacias, y ante la constatación de que las tres Administraciones gobernadas por el PP y el Arzobispado de Valencia están organizando el viaje papal sin contar con Moncloa. Una situación atípica en una visita en la que estarán presentes dos jefes de Estado (Benedicto XVI y el Rey) y un jefe de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Carácter pastoral

Presidencia de la Generalitat reconoció ayer la existencia de discrepancias con La Moncloa. El Gobierno valenciano considera que el viaje de Benedicto XVI "es de carácter pastoral", razón por la que se desplazará sólo a Valencia para acudir al V Encuentro Mundial sobre la Familia. En el carácter pastoral de la visita también insiste el director de comunicación de la Fundación del V Encuentro Mundial de la Familia, Javier Arnal, que considera que al Gobierno le han fallado "las formas y la precipitación" a la hora de implicarse en el viaje e intentar que Benedicto XVI visitase Madrid.

El pulso de la Generalitat con el Gobierno ha despertado la preocupación en la Nunciatura. En este contexto, el consejero de Agricultura y uno de los principales impulsores de la visita papal, Juan Cotino, acudirá el martes a Moncloa para aclarar la situación.