El juez exige una fianza de 8,5 millones para los acusados por el presunto fraude de Sol y Arena

El juez de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Roquetas de Mar (Almería) ha dictado un auto de apertura de juicio oral contra Pedro Mena, ex presidente de la comunidad de regantes del Poniente almeriense Sol y Arena, y Santiago Penichet, administrador de la empresa Tecnirriegos. Ambos deberán pagar una fiaza de 8,5 millones de euros para "asegurar" las responsabilidades pecuniarias que pudieran imponérseles. Los dos serán juzgados por sendos delitos de estafa por unas obras de regadío que contaron con una subvención de la Junta y un crédito con Cajamar.

La Comunidad de Regantes Sol y Arena, con unos 4.000 regantes y unas 6.000 hectáreas, sufrió un desfalco de, al menos, 7,5 millones de euros en unas obras encargadas por Mena. Un informe de la auditoría judicial, fruto de las diligencias previas a la causa contra Mena y Penichet, reveló que el gasto de las obras de regadíos se incrementaron, en tuberías, en un 315% por encima del precio comparativo con proveedores.

La Plataforma para la Democratización de Sol y Arena interpuso la querella por presuntos delitos de estafa, apropiación indebida y malversación de fondos. El que fuera líder de la plataforma y hoy presidente de Sol y Arena, Juan Romero, manifestó su alivio de que el caso entre ya en fase de juicio. "En todo este proceso se ha venido demostrando que nuestras críticas y denuncias estaban cargadas de razón y de pruebas. Tanto el fiscal como el propio juez acaban de corroborar nuestras peticiones. Lo que viene a demostrar que teníamos razón cuando dijimos que existían estas irregularidades, que no había ninguna intención de luchar por el poder para quitar a Pedro Mena sino que había argumentos sobrados para defender a los miles de regantes que creíamos que habían sido estafados", explicó Romero.

El fiscal pide en su escrito de acusación para ambos una pena de ocho años de prisión como presuntos autores de un delito continuado de estafa y tres años de prisión por un delito contra la Hacienda Pública, así como el pago de una multa de seis millones de euros. En concepto de responsabilidad civil ambos acusados, de forma solidaria, y la entidad Tecniriegos, de forma subsidiaria, deberán indemnizar a Sol y Arena con 5,1 millones y a la Junta de Andalcía con 3,4 millones de euros.

El fiscal considera en su escrito de acusación que Pedro Mena y Santiago Penichet, a principios de 1993 y con motivo de la inminente realización de unas obras de regadíos para el Campo de Dalías, !decidieron maquinar un plan para lucrarse en perjuicio de la propia Comunidad de Regantes y de la administración que subvencionaba las obras, repartiéndose los beneficios económicos de su ilícita actividad".